La oferta alojativa de Málaga capital sigue creciendo de manera más que considerable. A los muchos proyectos hoteleros que en los últimos años están viendo la luz, así como al incremento exponencial de viviendas y apartamentos turísticos, hay que sumar la proliferación de una modalidad algo más económica: los hostels.
Pese a que se trata de un producto con servicios alejados de los que ofrece un hotel, los nuevos proyectos dibujados en la capital de la Costa del Sol están dotados de detalles que los hacen especialmente atractivos, incluso con aires ciertamente futuristas.
El último de ellos es el que la empresa White Málaga (perteneciente al grupo White Spain) está ejecutando en la calle Hernán Ruiz, en pleno Centro Histórico y a apenas unos metros de la Plaza de las Cofradías.
La intervención, con una inversión global próxima a los 6 millones de euros, supone la rehabilitación completa y la reconstrucción de buena parte de un antiguo edificio de oficinas. Los trabajos han supuesto el vaciado completo del interior de la construcción y el mantenimiento del forjado.
Según cuenta el arquitecto responsable de la actuación, Óscar Agudo, el ritmo actual de la obra permite prever la finalización el próximo mes de febrero. Hay que recordar que la licencia expedida por la Gerencia de Urbanismo tiene fecha de principios de julio del año pasado.
El futuro establecimiento está planteado para que dé cabida a unas 140-150 personas. Lejos de la imagen tradicional de un hostels tipo barracón, con las literas repartidas en la habitación, el modelo que White Málaga pretende garantiza una mayor intimidad para los clientes a la hora de dormir.
En este sentido, se plantea la instalación de camas que disponen de un sistema que permite al usuario quedar encerrado, de manera que no esté a la vista del resto de compañeros de habitación. A esto se suma la existencia de varias habitaciones con cápsulas más amplias.