Una antigua almazara de aceite localizada en Puerto de la Torre, uno de los distritos de crecimiento de Málaga capital, pasará a albergar en los próximos años un nuevo proyecto residencial, con un máximo de 33 viviendas.
Este es al menos el propósito de la propiedad de los terrenos que tramita ante el Ayuntamiento de Málaga un estudio de detalle mediante el que sustanciar el cambio de uso a residencial de un espacio recogido en el planeamiento como comercial-industrial. Conforme a los estudios económicos realizados, la inversión global se estima en poco más de 3 millones de euros.
Al objeto de justificar este movimiento, el equipo técnico destaca que la planta se encuentra sin uso desde hace años. En concreto, se menciona que el cese de la actividad fue declarado a finales de 2013.
Atendiendo al contenido del estudio de detalle aprobado ya inicialmente por el Consistorio, el objetivo de la operación es desarrollar una edificación destinada a viviendas y los aparcamientos correspondientes a las mismas. Sobre la totalidad de las parcelas se permite un techo edificable máximo de 2.285 metros.
Las mismas incluyen actualmente la parcela R-1B, donde se localizan dos viviendas y un local comercial hacia la Avenida Andersen; el ámbito de la parcela de la antigua almazara, "edificación industrial con naves de almacenamiento y de procesado del aceite", en el que se incluye una chimenea de extracción de la caldera de vapor de transformación del orujo, que se encuentra protegida con la máxima figura, Bien de Interés Cultural (BIC).
Los redactores del documento indican que este elemento industrial ya fue objeto de un proyecto de traslado en noviembre de 2010, en el que se propuso su puesta en valor mediante el traslado a la plaza central del recinto ferial colindante, Sin embargo, la propuesta "se guardó en el cajón de los proyectos de iniciativa privada desechados por la diferencia de criterio entre técnicos de la administración local".
En el actual plan, se ofrece la cesión de un espacio de 44 metros cuadrados (4,4 metros de fondo por 10 metros de ancho) "para dotar al elemento del espacio aledaño necesario para potenciar su protagonismo".
De acuerdo con los detalles históricos recogidos, esta fábrica fue creada en 1954, siendo construida "por habitantes de la barriada siguiendo el proyecto de varios técnicos". Se reconoce que fue auspiciada por Manuel de los Ríos, empresario del sector que fijó su residencia en el Puerto de la Torre, "absorbiendo en su fábrica la transformación de la práctica totalidad de la producción olivarera abundante en esta zona antes de su expansión urbanística".
Dentro del ámbito destaca también la entrada a la antigua almazara, mediante portón, espacio de báscula de pesado y un patio trasero donde se ubican dependencias auxiliares y un acceso desde este nivel superior a la avenida Andersen.
La futura edificación, según se precisa, será escalonada en el sentido entre Avda Andersen y calle Platino, "haciendo una transición volumétrica en la zona de unión entre ambas calles y calle Bocaccio". El aprovechamiento de la parcela se materializa con frente a los tres viales que rodean la parcela, contando con planta baja más dos alturas de uso residencial hacia cada una de las calles. Se propone la posibilidad de ejecutar una lámina de agua (piscina) en la planta de cubierta, en la zona más adecuada para el soleamiento natural.