Casi dos años después de que El Corte Inglés activase la venta del antiguo edificio Gaybo, por el que llegó a pedir 12 millones de euros en el marco de una operación nacional de enajenación de activos, la hoja de ruta trazada varía. 

En ausencia de comprador, la cadena ha optado por abrir un camino alternativo y estudiar un cambio de uso urbanístico que permita destinar la totalidad del inmueble, con sus 5.000 metros cuadrados, a oficina. Hay que tener en cuenta que actualmente, según la referencia catastral, el inmueble tiene condición de comercial.

Para avanzar en esta senda, la entidad ya ha iniciado los primeros contactos con la Gerencia de Urbanismo, según han confirmado a EL ESPAÑOL de Málaga varias fuentes consultadas. A priori, la nueva apuesta de El Corte Inglés persigue encontrar una mejor salida comercial en un futuro más o menos inmediato, dada la importante necesidad de espacios existente en la capital de la Costa del Sol.

Sea como fuere, la explotación del complejo para oficinas se hará esperar varios años. No sólo por el tiempo que requiere el trámite ahora en marcha, sino por la existencia de un contrato de arrendamiento en favor de la Agencia Tributaria, que desde hace varios años ocupa parte de la edificación a cambio del pago de 753.000 euros anuales. 

A priori, el vínculo se extenderá en el tiempo hasta tanto en cuanto el organismo estatal no afronte la rehabilitación de su sede principal en Málaga, afectado por importantes taras. Si bien el proyecto de intervención se encuentra finalizado y a la espera de ser revisado, aún no se ha puesto en marcha la licitación de contratación de los trabajos, que van a requerir una inversión próxima a los 23 millones de euros.

Gaybo se encuentra situado en un punto estratégico de la ciudad, a pocos metros del centro comercial Vialia y de la estación de trenes. De acuerdo con la ficha catastral, dispone de unos 5.000 metros cuadrados de superficie.

Fue construido en el año 1918 por Adolfo Lapeira, con el objetivo de convertirse en una fábrica de distintos productos, desde envases litografiados y troquelados, hasta recipientes de hojalata, cajas de madera y carteles. Lamentablemente, la factoría, que fue una de las más importantes y modernas de su sector, cerró sus puertas en el año 1982.

A lo largo de los años, ha albergado distintos negocios comerciales. En 1987 se abrió el supermercado Gaybo, y desde 2003 ha habido un Supercor, un Cadenacor y una Tienda Outlet de El Corte Inglés.