Con el arranque de las obras de construcción del Metro de Málaga hasta el en torno al Hospital Civil se abre una nueva puerta para los millones de viajeros del suburbano. Tras años en los que el recorrido ha quedado cercenado por el retraso en los trabajos de ejecución y conquistado el Centro de la urbe, la llegada a la zona norte de la ciudad permitirá potenciar las virtudes del ferrocarril urbano.
La incorporación de los 1,8 kilómetros del ramal que en los próximos años pasará a formar parte de la red ya vigente, hará del Metro cumplir el objetivo para el que hace ahora casi dos décadas fue concebido, alcanzando una demanda estimada de 21 millones de pasajeros anuales.
Y hacerlo logrando para esos pasajeros tiempos de viaje ciertamente competitivos. Atendiendo a los documentos técnicos ya conocidos, el traslado desde la estación Guadalmedina, que se localiza junto a El Corte Inglés, hasta la parada del Nuevo Hospital, en el cruce de Blas de Lezo con la Avenida Arroyo de los Ángeles, supondrá apenas 4 minutos y 16 segundos.
Desde Guadalmedina a la primera estación proyectada, la de Hilera, serán 64,12 segundos; de Hilera a la Trinidad, donde estará la segunda estación, serán 58,51 segundos, y desde La Trinidad hasta la parada Hospital, otros 64,32 segundos. En el sentido contrario, es decir, desde Hospital a Guadalmedina el tiempo es algo menos, con 4 minutos y 6 segundos.
Con estos datos sobre la mesa, es posible saber, por ejemplo, cuánto tardará en su momento un pasajero en ir desde Atarazanas hasta el Civil. En ese supuesto, el tiempo será de unos cinco minutos y medio.
¿Pero y si el viajero parte desde la estación de Puerta Blanca, en la zona oeste? En ese caso, el tiempo se amplía a casi 15 minutos, ya que al recorrido desde Guadalmedina al Civil hay que sumar los 9 minutos y 42 segundos que tardará en llegar a Guadalmedina.
Si, por el contrario, el usuario procede de la zona de La Unión, por ejemplo, el tiempo en llegar hasta el Nuevo Hospital (que previsiblemente estará operativo para cuando el Metro al Civil esté finalizado) será de unos ocho minutos y medio.
La determinación de la Junta de Andalucía, con el objetivo de amortiguar las afectaciones de una obra de este calado, ha sido la de dividir en tres subtramos el recorrido total. Lo que ya se visualiza en la calle Hilera son los trabajos de la primera de las tres piezas del trazado: Guadalmedina-Hilera.
Conforme a las condiciones del contrato de adjudicación con Sando y Kerkros, unión temporal que se ha hecho cargo de este contrato, el plazo estimado para el desarrollo del primero de los subtramos es de 36 meses de obras. De acuerdo con este calendario, la infraestructura y superestructura (fases incluidas en el contrato) deben estar finalizadas en los primeros meses de 2027. La inversión formalizada roza los 45 millones de euros (IVA incluido).
Tres subtramos
El primero de los subtramos es el Guadalmedina-Hilera (637 metros), ya en obras. La intención de la Junta es la de licitar la segunda fase de la obra, Hilera-La Trinidad, en los primeros días de junio, con un precio de licitación cercano a los 48,3 millones, mientras que la tercera pieza es La Trinidad-Nuevo Hospital, que será licitada en octubre, con un precio de partida de 52,3 millones.
A diferencia del esquema que se llegó a manejar años atrás, el Metro al Civil irá completamente soterrado. Y va a ser construido mediante el sistema muros pantalla, el mismo que se ha empleado en toda la construcción de las líneas 1 y 2 ya en servicio.
La previsión es que las pantallas que den forma al túnel alcancen una profundidad de hasta 15 metros. Los datos técnicos recogidos en los proyectos prevén que la ejecución del túnel en su totalidad, de las tres estaciones soterradas y de los pozos generará un volumen de excavación de 417.079 metros cúbicos de tierra.
El túnel del tramo Guadalmedina-Hilera tendrá una profundidad media de 13 metros respecto a la cota de calle, y la estación Hilera bajará a casi 14 metros. La plataforma por la que circularán los trenes tendrá doble vía en placa, implantada sobre la contrabóveda. La estación consta de boca, vestíbulo y andén central, de 66 metros, para el acceso de los usuarios a los trenes. El diseño será funcional e idéntico a casi todas las demás paradas de la red, y su longitud posibilitará que circulen convoyes en doble composición.