El sonido del claxon del coche pasa a convertirse en compañero habitual de los cientos de conductores que desde este lunes y durante meses se van a ver damnificados por el avance de las obras de construcción del Metro de Málaga en dirección al Hospital Civil

Aunque la principal vía afectada por el próximo arranque de los trabajos de ejecución del túnel es Hilera, el impacto de la tremenda reordenación planteada para los próximos tres años se deja notar de manera clara sobre otras muchas vías, haciendo que surjan evidentes puntos negros en los que el conflicto parece asegurado. Al menos en los primeros días y semanas, en los que se hace imprescindible que los ciudadanos al volante se acostumbren a los cambios introducidos.

El gran ajuste se produce en el sentido oeste de la calle Hilera. Desde las 08:00 horas de este lunes, los conductores no han podido circular por el tramo de calle comprendido entre el cruce de Hilera con Armengual de la Mota y Monseñor Carrillo Rubio. Esto obliga a los conductores que deseen dirigirse hacia Teatinos a tomar la Avenida de Andalucía como alternativa de mayor capacidad.

La afectación se produce también en el sentido este de Hilera. Aunque en este caso de manera parcial. No pueden pasar coches desde el cruce con Monseñor Carrillo Rubio hasta Alonso de Palencia, con unos 400 metros de longitud. 

Como consecuencia, los vehículos que durante años han usado la calle Monseñor Carrillo Rubio para desembocar en Hilera y continuar en dirección este hacia la zona de El Corte Inglés, ahora se ven obligados a seguir por la calle Lehmberg Ruiz.

Una vía en la que se van a encontrar, también, con los coches procedentes de la Avenida Herrera Oria y los que salen del Puente de las Américas con objetivo común de dirigirse hacia la zona Este. La confluencia de estas tres fuentes de tráfico garantiza los problemas de circulación en una vía limitada.

A este puede sumarse una segunda zona de conflicto o retención en la parte de Hilera, sentido este, más próxima a El Corte Inglés. Porque es en este punto en el que se unirán (aunque hay semáforos) el tráfico de Lehmberg Ruiz, así como el que llega a Hilera desde la calle Alonso de Palencia. 

Otras calles afectadas

El embrollo para los conductores se extiende a otras vías de menor rango, pero que adquieren trascendencia en el actual esquema. Es el caso de la calle Capitán Marcos García, que en la tarde de este lunes se ha visto claramente afectada por los movimientos obligados por la obra. Esta calle une Ingeniero de la Torre Acosta (sentido norte) y Monseñor Carrillo Rubio. Y Capitán Huelin, donde la densidad de vehículos también se ha visto este lunes seriamente incrementada. Y, todo ello, en un momento del año en el que los colegios e institutos no están abiertos.

Hay que recordar que el establecimiento del recinto de obra, necesario para que los equipos de construcción del túnel avancen, va a hacer que la calle Santa Elena quede cerrada al tráfico (antes de la obra tenía sentido sur-norte), si bien sí se permitirá el paso transversal desde las calles aledañas.

Otra vía que queda sin acceso es la calle Don Ricardo, a la que se podrá acceder desde calle Don Cristian. La actuación incluye la ocupación de un tramo y la implantación de doble sentido en el resto de la calle, para permitir tanto el acceso al aparcamiento subterráneo del edificio Scala 2000 y el centro comercial El Corte Inglés, como la entrada y salida a la calle Doña Enriqueta.

Sí que se mantendrá el paso de peatones en todo momento en la calle Hilera, permitiendo el acceso a viviendas, negocios y campamentos de verano para los centros educativos existentes en la zona.  

Noticias relacionadas