La de este año va a ser una Feria completamente distinta para La Invisible. El cese de actividad ordenado a finales del año pasado por el área de Comercio del Ayuntamiento de Málaga se mantiene vigente, lo que va a impedir al colectivo cultural abrir a la fiesta el edificio que okupan desde hace años de manera irregular en pleno Centro histórico.
La propia organización ha venido a confirmar este extremo en su cuenta oficial de Facebook, en la que, pese al obstáculo evidente, pone sobre la mesa un plan alternativo en los festejos, en el que se pide a los asistentes que traigan su propio refrigerio y que pistolas de agua para, en la tarde de este sábado, participar en una batalla naval.
“Este sábado 17 de agosto a las 12:00, tomaremos Calle Nosquera con una propuesta distinta: una Feria no mercantilizada, donde las vecinas son el corazón de la celebración”, explican al inicio del mensaje, en el que apostillan su apuesta por reivindicar el espacio público como un lugar de encuentro, de cultura libre y de expresiones populares.
En este escenario, desde La Invisible pide que se acuda "emperifollá y puntual!" "Este sábado tomaremos la calle alegres, unidas, diversas y articuladas contra la censura y el modelo de ciudad asfixiante de Paco de la Torre. ¡Un Centro de Málaga vivo ante el modelo depredador, unos barrios creativos donde poder respirar e imaginar a la sombrita de los árboles una Málaga respirable y libre de hormigón!", cargan contra el regidor.
"Que se acabe la pereza suprema bajar a la feria de copia y pega. Sufrimos cada día la privatización de las calles surcando entre mil mesitas y vemos atónitas como se estira el chicle de las fiestas populares para dejarlas irreconocibles para el beneficio de unos pocos. ¡Reclamamos desde el disfrute y el encuentro el espacio público en tanto que es nuestro!", se añade en el mensaje. Un modelo diferente al que, por ejemplo, se vivió en la edición del año pasado, cuando por La Invisible, engalanada de Feria, pasó hasta el mismísimo Pequeño Nicolás.
Este giro en la organización se debe a la decisión del Consistorio de decretar el cese de actividad de La Casa Invisible por carecer de licencia. Según informaron en su momento desde la Casona del Parque, esta drástica decisión se tomó porque en el inmueble se realizaban actividades de hostelería sin someterse a los medios de intervención administrativa correspondientes.