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Nuevo paso en la operación de La Rosaleda: convenio de las tres propietarias para los estudios y actuaciones previas

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La gran operación para ampliar y transformar La Rosaleda en un estadio preparado para albergar partidos del Mundial de Fútbol 2030 avanza. El último movimiento lo acaba de dar el Ayuntamiento de Málaga, que ha dado luz verde el texto del convenio que firmará con la Junta de Andalucía (a través de la Consejería de Cultura y Deporte) y la Diputación de Málaga, como propietarias del estadio, para la realización de estudios y actuaciones preparatorias para impulsar la actuación.

Las tres administraciones presentaron la candidatura para que La Rosaleda fuese uno de los campos de fútbol elegidos por la Real Federación Española de Fútbol para acoger partidos de esta competición en el marco de la candidatura conjunta, finalmente, elegida, entre España, Marruecos y Portugal para la celebración de dicho acontecimiento deportivo.

El objeto del convenio planteado se centra en la realización de estudios y actuaciones preparatorias para la ampliación, renovación y rehabilitación de la Rosaleda. Para continuar con los análisis necesarios, a través de este acuerdo, las partes firmantes consideran conveniente establecer un fondo de financiación dotado de 705.000 euros que deberán ser aportados por las tres instituciones (235.000 euros cada una). 

En el caso del Ayuntamiento de Málaga, la cantidad a consignar asciende a 192.166 euros ya que ya ha sufragado hasta la fecha varios estudios y proyectos a cuya contratación ha destinado 42.834 euros.

Hay que recordar que desde hace menos de dos semanas se ha activado la cuenta atrás para que Málaga pueda ser sede del evento internacional. La adecuación de La Rosaleda a las condiciones exigidas por la FIFA va a suponer una inversión que se estima en 230 millones de euros.

Detalles de la ampliación

Entre las acciones a materializar está la ampliación del aforo actual, con 10.000 espectadores netos, y otros 5.000 para público VIP y dotación de prensa, pasando así de los 30.044 espectadores actuales a 45.000 de aforo bruto. La propuesta arquitectónica pasa por crecer grada sobre grada, obteniendo tres niveles de graderío.  

Asimismo, se remarca la necesidad de que la cubierta sea completa para garantizar que todas las localidades están completamente cubiertas. También incorporará las salas necesarias para la prensa y TV, así como zonas de hospitalidad y aparcamiento.

Y todo ello debe estar finalizado y listo para ser revisado por los organizadores a finales de 2028. Es decir, casi año y medio antes de que tenga lugar el Mundial. Este es uno de los elementos clave en el futuro del proyecto, ya que fuerza a las administraciones promotoras a activar y formular todos los estudios y anteproyectos necesarios en 2025.