Este martes se celebró la Gala de la Guía Michelín 2024, que tuvo lugar en el Centre de Convencions Internacionals de Barcelona (CCIB) que gestiona Fira de Barcelona. Como cada año, durante el evento se anunciaron las nuevas estrellas Michelín, pero también si todos los restaurantes que tenían al menos una la mantenían, o no.

En la provincia de Málaga hubo una de cal y otra de arena. El Restaurante El Lago de Marbella se llevó un mazazo perdiendo el brillo que había logrado mantener durante 18 años, pero Back logró su primera estrella. La Guía Michelín ha reconocido a este negocio de la Costa del Sol con el jienense David Olivas al frente, junto al sumiller rondeño Fabián Villar.

Back*, Marbella

El de Úbeda ha desarrollado su carrera profesional en la provincia de Málaga. Antes de abrir Back en 2016, trabajó como chef ejecutivo en un dos Estrellas Michelin. Así, recientemente Back ha acaparado varios premios y distinciones: Mejor Restaurante de Cocina Creativa en 2020 y Olivas fue catalogado como mejor jefe de cocina del 2019.

Sobre qué se come en Back, este restaurante ofrece un único menú degustación valorado en 120 euros, a los que debes añadir otros 80 euros si quieres disfrutar del maridaje. Entre los platos que conforman este menú, calamar de potera de Estepona e hinojo marino encurtido o pechuga de pichón frito en costra de pan, entre otros.

Skina**, Marbella

Uno de los restaurantes del chef asturiano Marcos Granda en Marbella, Skina, mantiene sus dos estrellas Michelín. Abierto desde 2004, el chef propone en este local una experiencia muy diferente a la del otro restaurante que regenta, Nintai. Skina es todo un homenaje a la multicultura, de una forma muy creativa galardonando a la cocina tradicional del sur de España.

Con una carta de vinos de más de 950 referencias, en Skina celebran la gran tradición gastronómica andaluza, recreándola con imaginación y personalidad propia, empleando ingredientes de alta proximidad, temporalidad y calidad. Lo que viene siendo una reinvención de los platos de toda la vida.

Bardal**, Ronda

La Guía Michelín asegura que si pasas cerca de la que llaman la ciudad soñada, Ronda, debes desviarte y pasar por Bardal, un dos estrellas Michelín situado en el citado municipio malagueño, que está considerado como uno de los más bonitos de Andalucía.

El chef Benito Gómez, de origen catalán, lidera el restaurante Bardal, que se encuentra a apenas unos metros del Tajo de Ronda. Su cocina es creativa, pero no se caracteriza precisamente por estridencias, sino por sabores reconocibles que enlazan con la tradición local jugando con contrastes y texturas. En la guía Michelín expresan que cuentan con un menú sorpresa que varía en función del número de platos, pero en su web encontramos dos menús diferentes, el Menú Bardal (180€) y el Gran Menú Bardal (215€). Así, se les puede añadir una selección de vinos por 100 euros o quesos andaluces por 25.

José Carlos García*, Málaga

Un brillo sigue vigente en el Muelle 1 de Málaga capital gracias al cocinero José Carlos García. Más de veinte años de experiencia avalan a este chef que echó los dientes en el mítico Café de París. García asegura que desde su restaurante se "cuida y mima el producto de cercanía, que ocupa el 70% de la oferta gastronómica".

Es por este motivo que la Guía Michelín ha considerado que debe mantener su estrella Michelín. Su menú degustación cuesta 139,50 € y está conformado por una amplia variedad de sabores malagueños entre los que podemos encontrar propuestas de pescado como la quisquilla, el salmonete, el chipirón o la lubina, que comparten protagonismo con verduras y otras carnes. También te dan la opción de regalar el menú Emotions esta Navidad por 225 euros.

En su web aseguran de que se trata de “un menú con una mirada a la cultura malagueña”. El establecimiento solo cuenta con seis mesas, por lo que, más que nunca, es muy importante reservar con antelación si estás interesado en darte un capricho de altura en pleno Puerto de Málaga.

Sollo*, Fuengirola

Y en el grupo de los restaurantes que mantienen una estrella Michelín, nos trasladamos a Fuengirola. Cocinero e investigador, Diego Gallegos, que está al mando de Sollo, es conocido en el panorama gastronómico de Málaga como “el chef del caviar”. Brasileño de nacimiento y malagueño de adopción, este chef iba para abogado, pero acabó enamorado de la que ahora es su profesión: la cocina.

Si hay algo que caracteriza a la cocina de Diego es cómo ha introducido un punto singular en la gastronomía malagueña ofreciendo peces de río en su menú. Además, a raíz de su trabajo de investigación en la recuperación del esturión andaluz, utiliza el caviar como producto estrella en su cocina, de ahí su mote.

Cuentan con un menú degustación valorado en 150 euros. Entre los platos que lo conforman, trucha ecológica, consomé de jamón ibérico y ajo asado o esturión, foie y crema de tubérculos. 

Messina*, Marbella

El restaurante Messina abrió sus puertas hace casi dos décadas gracias al esfuerzo de sus dos propietarios, Pía Ninci y Mauricio Giovanini, pero no fue hasta 2016 cuando, tras mucho trabajo, lograron el reconocimiento de la estrella Michelín.  El Restaurante Messina está ubicado en la avenida principal de Marbella, junto al Hotel Amare.

La carta también ofrece una amplia variedad de productos locales como pescados y mariscos, todos, según el restaurante, de la costa marbellí. En todos los platos se puede apreciar una gran técnica, con presentaciones minimalistas, pero muy elegantes.

Tienen un menú degustación de 105 euros y otro de 130, aunque también dan la libertad al cliente de poder elegir a la carta diferentes platos para probar por separado como lubina a la plancha con su caldo y verduras en mantequilla.

Nintai*, Marbella

Es el 'japo' por excelencia del municipio malagueño de Marbella. Al mando también está el asturiano Marcos Granda. Nintai solo cuenta con doce asientos exclusivos alrededor de una barra de madera donde el itamae corta con sutileza el pescado y prepara un sushi "impecable" -también cuentan con la Omakase Room-.

Los productos premium de temporada, las combinaciones más originales y los maridajes especiales del sumiller con sake o con champagne, provocan en nuestras pupilas un desconocido pero sabroso sabor, el umami, en una atmósfera donde te sentirás descansado y relajado.

Kaleja*, Málaga

Hace honor a su nombre, pues Kaleja es una palabra sefardí que significa "callejón" y que nos habla sobre el peculiar emplazamiento del local, en la bella judería malagueña y a pocos metros del Museo Picasso.

Lo primero que destacan en la Guía Michelín es lo mucho que llama la atención el sutil olor a humo, un elemento esencial en la propuesta diferencial de esta casa, ya que el chef Dani Carnero plantea una cocina de las de antes desde la perspectiva actual, trabajando al calor de las brasas en largas cocciones (lo que llaman "cocina de candela") para rescatar los sabores de su infancia, en muchos casos asociados a recetas tradicionales andaluzas que está salvando del olvido.

Cuentan con dos menús degustación [Memoria (90 euros) y Gran Menú Memoria (120 euros)]. El de memoria es la estrella de la casa. Este menú está elaborado con productos de mercado y temporada, por lo que su composición es cambiante, no así su proceso y cocinado, que mantiene la impronta tradicional de la cocina de Dani. Este consta de 16 elaboraciones. El segundo es una opción perfecta para disfrutar de una forma más viva de la candela de Kaleja, sin renunciar a la inventiva y genialidad que Dani y el mercado pueden ofrecerle. Consta de 12 elaboraciones.