La gallina de los huevos de oro del turismo sigue fuerte en Málaga: 21.220 millones de ingresos en 2024
- La Costa del Sol batió el año pasado otra vez su récord de viajeros, con 14,4 millones, y el sector ya genera cerca de 140.000 empleos.
- Más información: El aeropuerto de Málaga pulveriza su récord de pasajeros ya en noviembre y superará los 25 millones este año
El turismo ha sido, es y seguramente será el motor económico de Málaga. Ningún sector mueve lo mismo ni en ingresos ni en empleo y el año pasado batió un nuevo récord. En 2024 visitaron la provincia 14,4 millones de personas que motivaron un ingreso de 21.223 millones de euros y la existencia de 137.408 puestos de trabajo.
Málaga tiene la suerte de tener una gallina de los huevos de oro. Por una parte por su privilegiada situación geográfica y su clima y, por otra, porque se han hecho las cosas bien.
Hay un magnífico aeropuerto internacional con 140 rutas directas, una buena estación de tren, buenos accesos por carretera (aunque siempre mejorables), una oferta turística muy variada, un sector empresarial que lleva décadas invirtiendo en dar un servicio de calidad en hoteles, restaurantes o comercios, unos empleados que suelen ser empáticos y serviciales con la sonrisa por delante (vaya a Croacia, Francia o Rusia y compare) y unas administraciones públicas que cada año destinan muchos millones de euros a promoción y que, en esto sí, van de la mano.
El resultado es que, pese a las guerras, las pandemias y todo tipo de incertidumbres, Málaga sigue siendo uno de los mayores destinos turísticos de España y Europa. El presidente de la Diputación de Málaga y de Turismo Costa del Sol, Francisco Salado, ha presentado este miércoles el balance del año 2024, que ha calificado de "extraordinario".
A Málaga llegaron el año pasado 14,4 millones de turistas por tierra, mar y aire. Es casi medio millón más que en 2023, marcando un nuevo récord. La cantidad de viajeros siempre ha sido importante. De hecho, los políticos siempre dicen que prefieren calidad a cantidad, pero en cuanto hay un descenso en los números se generan dudas.
En este caso, la estrategia de la Costa del Sol es "promover la calidad frente a la cantidad, conseguir más rentabilidad y crecer en empleo" y, según Salado, se ha conseguido. En 2024 el turismo dejó 21.223 millones de euros, un 10,9% más que en 2023; hay 137.408 empleados, un 7% más; y el RevPar, el índice que mide la rentabilidad en los hoteles, ha subido un 6% hasta rozar los 95 euros.
Hace años el reto de la Costa del Sol era romper la estacionalidad, es decir, que vinieran turistas todo el año y no solo en verano. Salado asegura que eso ya se ha conseguido. En estos momentos, el objetivo es generar más ingresos y empleo con menos turistas, que los que vengan gasten más.
El turismo internacional vuelve a ser clave, aumentando su presencia en los establecimientos reglados un 7%. Hay crecimiento de los principales mercados extranjeros como Reino Unido, Alemania, Francia, Italia, Irlanda, Países Bajos o Estados Unidos.
El turista español ha caído un 7% hasta noviembre, motivado por la subida de precios, aunque sigue siendo un baluarte para este destino y se harán campañas promocionales específicas para captar su atención. Fitur, que se celebra en Madrid a finales de enero, será importante.
El año pasado ha habido también menos cruceristas, un 7% menos hasta los 465.000, debido a un menor esfuerzo de las compañías navieras, aunque esta reducción no es algo que preocupe especialmente al sector ya que es un turismo de paso que no suele alojarse en los hoteles y su peso en el global es pequeño.
De cara a 2025 las previsiones son, según Salado, "positivas" ya que las líneas aéreas han incrementado un 10,7% sus plazas a Málaga hasta los 4,1 millones de asientos. Y eso es síntoma de que ven demanda y negocio.
Salado ha insistido en que promover la turismofobia es un "gran error" y ha puesto el ejemplo de Barcelona, "que se ha pegado un tiro en el pie". El presidente de la Diputación ha recalcado que el turismo no es el causante de la falta de vivienda, sino la "falta de estrategia de las administraciones públicas para hacer VPO".
"Estamos trabajando en la buena dirección. Abiertos los 365 días del año y primando la calidad y la rentabilidad", ha resumido Salado, quien, no obstante, recuerda que no hay que dormirse en los laureles porque la competencia es enorme.