No es M5, pero lo parece: es un BMW Serie 5 repleto de accesorios M Performance
La actual generación de la Serie 5 de BMW lleva entre nosotros poco más de un mes, y aunque, como es norma dentro del modelo, está prevista la llegada de una variante de altas prestaciones -M5- de momento los acérrimos amantes de las altas prestaciones tendrán que esperar algunos meses hasta su presentación.
Para hacer la espera algo más llevadera, los chicos de BMW han desarrollado el catálogo M Performance, una especie de "tienda" de accesorios de todo tipo, tanto estéticos como de tipo mecánico, que mejoran la apariencia y la conducción de cualquier BMW sin necesidad de recurrir a las versiones más deportivas de cada modelo.
Repleto de piezas, el último modelo en pasar por la "pasarela" ha sido la Serie 5, que muestra su carácter más agresivo con una vestimenta que adelanta lo que será la llegada del M5 más potente de la historia del modelo, con una potencia que superará los 600 CV.
En el frontal encontramos un paragolpes más agresivo, rematado por una moldura inferior en fibra de carbono, entradas de aire más prominentes y una parrilla pintada en color negro brillante en sustitución de los típicos riñones con terminación cromada.
En el lateral los cambios más evidentes se centran en las llantas, de 20 pulgadas y diseño exclusivo, así como en las taloneras, más abultadas. Las cubiertas de los retrovisores pueden ir también terminadas en fibra de carbono. Además es posible adquirir algunos adhesivos decorativos para, por ejemplo, la zona de los tiradores de las puertas.
En la parte trasera de nuevo el cambio más evidente es el que hace referencia al paragolpes, más prominente, con molduras negras, salidas de escape trapezoides integradas y un destacado difusor -funcional- en la parte central. En la parte superior del portón del maletero es posible añadir una pequeña moldura de fibra de carbono.
Mecánicamente, las motorizaciones de la Serie 5 pueden pasar por las manos de los especialistas de M, mejorando ligeramente su rendimiento. De esta manera, por ejemplo, el 530d mejora sus cifras, pasando de 265 CV y 650 NM a 292 CV y 650 NM. Dentro del catálogo de piezas M Performance destaca también un equipo de frenos sobredimensionado, con pinzas fijas de cuatro pistones en el eje delantero y un pistón en el trasero pintadas en color rojo.