Probamos el Opel Grandland X PHEV: una buena opción para iniciarse en los coches electrificados
Analizamos el Opel Grandland X PHEV, el primer SUV de la marca con la tecnología híbrida enchufable que cuenta con una autonomía en modo eléctrico cercana a los 60 kilómetros.
29 julio, 2020 23:26Noticias relacionadas
En El Español hemos realizado una primera prueba al nuevo Opel Grandland X PHEV, la variante híbrida enchufable de este modelo desarrollado dentro del Grupo PSA (Peugeot y Citroën).
Este Opel Grandland PHEV comparte numerosos elementos con el Peugeot 3008, que también cuenta con versiones híbridas enchufables.
Lo que hace de particular a este modelo de Opel es que ofrece lo mejor de dos mundos, ya que dispone de un motor de combustión de gasolina, lo que asegura una buena autonomía, con la posibilidad de circular en modo 100% eléctrico.
Esta última característica le permite obtener la etiqueta CERO de la DGT y beneficiarse de ventajas como el libre acceso a las zonas restringidas de tráfico y no pagar en algunas ciudades con estacionamiento regulado.
Por todo ello, desde aquí pensamos que un coche híbrido enchufable, como este SUV, es una buena opción para introducirse en el ‘mundo’ del coche electrificado.
Precio elevado
Este nuevo Opel Grandland X PHEV, que se fabrica en Eisenach (Alemania), está disponible con un precio inicial de 43.525 euros (para la variante 4x2 de 225 CV y acabado Selective) y un precio máximo de 53.425 euros (para la versión 4x4 con el acabado Ultimate).
Estos precios, no obstante, son de catálogo, sin promociones de la marca y sin las ayudas del Gobierno (como el Renove o el Moves).
Según Opel si aplicamos el mayor descuento posible y las ayudas al Gobierno, estaríamos hablando de una cifra inicial de 34.500 euros para la versión más accesible. La variante que hemos probado, que es la más cara, tendría un precio con oferta de 44.300 euros.
También conviene recordar que a los precios señalados hay que sumar el coste del poste de carga más el de la instalación.
Otros SUV híbridos enchufables
A la hora de buscar rivales de este coche, podemos encontrar los siguientes:
Kia Niro PHEV | desde 35.600 euros
Kia XCeed PHEV | desde 35.925 euros
Ford Kuga PHEV | desde 37.800 euros
Citroën C5 Aircross PHEV | desde 42.700 euros
Opel Grandland X PHEV | desde 43.525 euros
Peugeot 3008 PHEV | desde 43.700 euros
Jeep Compass 4xe | desde 44.900 euros
Volvo XC40 PHEV | desde 45.250 euros
BMW X1 PHEV | desde 47.600 euros
BMW X2 PHEV | desde 48.500 euros
Respecto a todos ellos vemos que el Opel tiene un precio que se sitúa en la mitad de la clasificación.
20.000 unidades vendidas en España
Este nuevo Opel Grandland X PHEV es el primer híbrido enchufable (PHEV) desarrollado por Opel hasta la fecha.
Esta variante híbrida enchufable llega al Grandland X que es un SUV de tamaño medio que fue introducido en 2017 y del que la firma alemana ha comercializado cerca de 180.000 unidades desde entonces.
En España, Opel ha comercializado un total de 20.000 unidades desde que se pusiera a la venta, lo que supone cerca del 11% del total de las ventas de este modelo.
Sistema de propulsión
En cuanto al sistema de propulsión dependerá de si estamos ante la versión más potente con tracción total o bien la variante de 4x2.
Comenzando por la versión probada, que es el 4x4, incorpora un motor de gasolina, conocido dentro del grupo PSA con 1,6 litros y 200 CV de potencia. A este motor de gasolina se le suman dos motores eléctricos, uno en el eje delantero y otro en el trasero.
El motor eléctrico del eje delantero tiene una potencia de 110 CV (81 kW) y el motor eléctrico del eje trasero ofrece 113 CV (83 kW). El segundo motor está, junto con el diferencial, integrado en el eje trasero, permitiendo así proporcionar la tracción 4×4 siempre que sea necesaria.
La potencia conjunta de todos estos motores es de 300 CV (recordamos que la potencia combinada no es la suma de todos ellos).
Por su parte, la versión 4x2 cuenta también con un motor de gasolina de 1,6 litros pero con 180 CV y el motor eléctrico delantero de 81 kW. Entre los dos la potencia conjunta es de 225 CV.
Según Opel, la principal finalidad del motor de combustión es que sea utilizado a velocidades medias y altas. Por el contrario a velocidades más bajas se utilizará el sistema de propulsión eléctrico.
La transmisión es en ambas versiones la misma, una caja automática de convertidor de par de ocho velocidades.
En Opel señalan en este sentido que la versión que tendrá más demanda (en torno al 70% de las ventas) será la variante 4x2. Esto quiere decir que el Grandland X PHEV 4x4 rondará el 30% restante.
Batería y autonomía
En cuanto a la batería es la misma en ambas versiones. Se trata de una batería de 13,2 kWh de capacidad de ion-litio. Con esta batería, el Grandland PHEV tiene una autonomía de entre 57 y 59 kilómetros en modo 100% eléctrico.
Eso quiere decir que para una persona que realiza 10.000 kilómetros al año tiene que hacer aproximadamente tres cargas a la semana. En el caso de realizar 15.000 kilómetros al año prácticamente habría que cargar el coche cinco veces por semana (es un cálculo aproximado).
En cuanto al tiempo de carga, de serie la capacidad del cargador y del cable es de 3,7 kW. Sin embargo, opcionalmente se puede incluir un cable de 7,4 kW, lo que reduce el tiempo de carga hasta aproximadamente las dos horas. En el otro extremo, en el caso de que optemos por un enchufe doméstico, con el cable modo 2 y a una potencia de carga de 1,8 kW el tiempo de carga es de 7 horas y 10 minutos.
Por último, si vamos a un cargador público, no conseguiremos cargar mucho más rápido. Incluso en los sistemas y cargadores más potentes con el Modo 3, el tiempo de carga se mantiene en 1 hora y 50 minutos. Y también conviene recordar que Opel afirma que la garantía de la batería es de 8 años o 160.000 kilómetros.
Al volante
Llega el momento de ponernos al volante del nuevo Opel Grandland X PHEV en su versión más potente con 300 CV y tracción 4x4. Por delante tenemos un recorrido de 150 kilómetros para conocer al detalle cómo funciona el sistema.
Nada más subirnos al coche lo primero que hacemos es anotar el consumo que tenía el vehículo, antes de hacer comenzar la prueba. Un gasto que el ordenador fijaba en 7 litros, una cifra muy por encima de los 1,3 litros oficiales y que deja bien claro que este coche es eficiente si circulamos el mayor número posible de kilómetros en eléctrico.
La batería está bastante cargada y el ordenador muestra que por delante tenemos 40 kilómetros en modo 100% eléctrico.
Así que empezamos la marcha en el modo híbrido. Dentro de los posibles modos (se puede reservar el eléctrico puro para una parte determinada del camino) optamos por el modo híbrido. De esta manera el sistema gestionara de la mejor manera posible el estado de carga de la batería.
Pasan los primeros kilómetros y nos sorprende el comportamiento del sistema híbrido. Vemos que el coche va una gran parte del tiempo con el sistema híbrido funcionando o incluso en modo 100% eléctrico. Incluso a alta velocidad vemos que se puede circular en modo 100% eléctrico, algo que nos deja completamente sorprendidos.
Continuamos nuestro trayecto principalmente por vías rápidas y vemos que en 50 kilómetros que llevamos recorridos el coche marca un consumo de 3,7 litros. Una cifra muy buena teniendo en cuenta que estamos ante un coche 4x4 y con cerca de 1,9 toneladas de peso.
Seguimos avanzando y nos llama la atención las transiciones entre el modo eléctrico puro y el térmico puesto que apenas podemos apreciarlas. Por ejemplo a una velocidad constante de 100 kilómetros por hora, siempre que no se pise el acelerador con contundencia y siempre que haya batería el coche va en eléctrico. Y si lo que hacemos es acelerar con fuerza, es entonces cuando entra el motor térmico para funcionar así con mayor potencia.
Han pasado ya 115 kilómetros de la ruta y comprobamos que ya no queda nada de batería. Esto quiere decir que podemos circular más de 50 kilómetros en modo eléctrico o bien prácticamente el doble en modo híbrido. En este recorrido de 115 kilómetros, el coche ha presentado un gasto de 4,4 litros, una cifra sobresaliente. Llegamos al final de la ruta. Ya hemos recorrido 148 kilómetros a una media de 80 km/h. Y el gasto que ha dado el vehículo ha sido de 4,9 litros.
Conclusión
Esta primera toma de contacto con el Opel Grandland X PHEV nos ha dejado un buen sabor de boca. Hay que reconocer que es un coche caro, que su precio es elevado. Es difícil argumentar que un coche de una marca generalista cueste unos 44.000 euros, precio con oferta (el precio de catálogo es de 53.000 euros).
Pero también hay que reconocer que este Grandland PHEV incorpora la última tecnología. Para empezar, no existe un gran número de SUV compactos que sean híbridos enchufables. Y a ello se suma que el sistema funciona realmente bien. Es suave, no se notan las transiciones y los consumos son muy exiguos.
Con una autonomía que supera los 50 kilómetros en modo 100% eléctrico, es una cifra más que razonable para poder circular prácticamente a diario (siempre que se realicen cargas también en el día a día).
¿Aspectos a mejorar, además del precio? Pues sorprende que si estamos ante un coche tan tecnológico y evolucionado cuente con elementos como un cuadro de instrumentos analógico que nos recuerda a coches más antiguos.
Valoración
Diseño: 7
Espacio interior y maletero: 8
Motor, cambio y prestaciones: 8,5
Confort y terminación: 7,5
Equipamiento en seguridad y tecnología: 9
Diversión al volante: 8
Precio: 6