Nos subimos (por un coche) al Airbus A400M que repatriará a los españoles de Afganistán
Reproducimos a continuación una experiencia vivida como periodista de Motor en el interior de este avión militar en la base militar de Zaragoza.
17 agosto, 2021 23:57Noticias relacionadas
Como periodista del canal de Motor de EL ESPAÑOL son multitud de situaciones únicas las que hemos vivido al volante. Hemos pilotado monoplazas en circuito, conducido más allá del Círculo Polar Ártico con temperaturas de 25 grados bajo cero, recorrido una base del ejército de los Estados Unidos con un vehículo de hidrógeno…
Sin embargo, la experiencia que vivimos hace ya un par de años que narramos a continuación es de la que nunca se olvidan. Y no solo no se olvida sino que ahora estos recuerdos vuelven a estar más presentes que nunca con las últimas noticias que estamos viviendo tras la toma control de Afganistán por los talibanes.
Hablamos de la repatriación de los españoles y colaboradores de Kabul. Una misión arriesgada que comenzó esta semana con el envío de dos aviones A400M de las Fuerzas Armadas con destino Dubái para posteriormente aterrizar en el aeropuerto de Kabul.
¿Y qué tiene que ver esto con la información de Motor?, se preguntarán. Pues bien traemos a continuación este recuerdo porque, con motivo de la presentación de un coche (el BMW X4 de nueva generación), tuvimos la oportunidad de conocer de cerca la base militar de Zaragoza.
Una visita de excepción que también nos permitió conocer el Airbus A400M e incluso subirnos a él para ocupar durante unos minutos, la misma posición que tienen a lo largo de estas horas los militares que tienen la misión de repatriar a los españoles y colaboradores en Afganistán. Así fue nuestra experiencia…
Detalles previos: convencer al ejército
Poder realizar una jornada de estas características no es nada fácil. Y más cuando se trata de un evento privado en el que hay que involucrar al Ejército español y en el que se pide rodar por las pistas de aterrizaje vehículos a alta velocidad.
Sin embargo, en BMW querían hacer algo llamativo para el lanzamiento de la segunda generación del X4. Al tratarse de un SUV deportivo, los responsables de la marca en España buscaban transmitir las líneas emocionales de este todocamino de tipo coupé con una experiencia única.
Y así fue cómo recibieron la propuesta de una compañía de eventos conocida como Auriga, que posteriormente fue comprada por Acciona. Esta empresa propuso a BMW realizar la presentación de este modelo, el BMW X4 en la base militar de Zaragoza, la misma de la que han partido los aviones de repatriación hace algunas horas.
Llegamos a Zaragoza, vamos a la base
Nuestra llegada a Zaragoza pasa volando. Venimos desde Madrid así que en el AVE en un 'visto y no visto' nos hemos plantado en la estación de Zaragoza-Delicias. Una vez allí, nos dirigimos al parking de la estación y tras acreditarnos recogemos las llaves del coche que nos llevará a la base militar, que está a muy pocos kilómetros de la estación.
Tras llegar a la misma, al ser una 'visita' concertada el 'papeleo' se hace casi de inmediato y rápidamente pasamos a las instalaciones. Si alguien ha ‘tratado’ alguna vez con el Ejército, muchos sabrán las particularidades de esta 'institución'. Al ser un emblema de un Estado, los protocolos, tiempos de espera y burocracia que rodea a todo lo relacionado con lo militar suele ser complicado.
Sin embargo, luego, una vez que tienes su autorización y se les conoce ‘de cerca’, el trato personal es exquisito, cercano y amable.
“Bienvenidos a la base militar de Zaragoza”, nos dice el militar que está al mando en la jornada de hoy. Es el momento de acercarnos al mando para preguntarle por la base. Este miembro del ejército nos da unas pinceladas sobre la misma y nos recuerda que entre 1953 y 1992 era una de las tres bases aéreas de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos en España, junto con Torrejón (Madrid) y Morón (Sevilla).
El descomunal Airbus A400m
Los militares nos reúnen a todos los periodistas y nos piden que miremos hacia la puerta del hangar. Las puertas se abren poco a poco y ahí vemos al coche que habíamos venido a probar junto a un flamante Airbus 400M.
Es entonces cuando los militares nos cuentan que Zaragoza es una base muy importante para España puesto que en ella está el pasado y el futuro de la aviación militar en España. En concreto, Zaragoza cuenta con diez aviones militares Hércules que, poco a poco y hasta 2022, van a ser sustituidos por los flamantes Airbus A400M –ya cuentan con dos unidades- que se ensamblan en Sevilla.
Estar junto al Airbus A400M es imponente, en todos los sentidos. Se trata de un avión militar de carga muy caro –su precio ronda los 140 millones de euros-, que tiene unas dimensiones espectaculares: mide 45 metros de largo -la mitad de un campo de fútbol- y su altura máxima es de casi 15 metros –aproximadamente como la altura de un cuarto piso-.
De repente se baja la rampa de carga y tras los movimientos de los militares vemos descender otra unidad del nuevo X4.
Subimos al avión
En BMW han conseguido los permisos necesarios para realizar la rueda de prensa dentro del Airbus A400m. Es, con toda probabilidad, la primera vez que, tanto los responsables del departamento de comunicación de la compañía como para los periodistas allí asistentes, celebren una rueda de prensa dentro de un avión militar de estas características.
Y allí, sentados en los asientos del Airbus A400m, que nada tienen que ver con los asientos tradicionales de un avión, desde BMW nos recuerdan la importancia de la gama SUV dentro de la marca.
Nuestra mirada, no obstante, se dirige hacia el compartimento de carga de este avión. Cualquier parecido con un avión comercial es pura coincidencia.
Todos los asientos están en los laterales del avión y nosotros los 'pasajeros' estamos sentados unos frente a otros. En el centro un enorme espacio de unos tres metros de ancho en el que destacan numerosos anclajes para sujetar la carga. A ello se suma un increíble espacio hasta el techo. Una nave, sin duda, de enormes proporciones, que deja con la boca abierta a todo aquel que está a su lado.
Competición con los F18
Continúa nuestra visita en la base de Zaragoza y llegamos a otro de los momentos más esperados del día. Los militares han preparado un despegue de dos cazas F-18 en una pista relativamente cercana a nosotros. En otra pista paralela, un BMW X4 a los mandos de Alberto Rodríguez, director técnico de la empresa organizadora del evento, acelerará a fondo para ver quién gana esta particular carrera.
Obviamente, los cazas son más rápidos que el coche. Conviene recordar en este sentido que un F-18 es capaz de alcanzar una velocidad máxima de 1,8 Match (unos 2.222 km/h) en el aire. En realidad, no se trataba de una competición real sino más de bien de una ‘excusa’ para ver de cerca el despegue de estos dos aviones, que es completamente espectacular.
Despedida de la base
Tras la rueda de prensa en el Airbus A400M y el increíble despegue de los F18 llega el momento de realizar algunas pruebas con el coche en las instalaciones de la base. Sin duda, un broche de oro que nos ha permitido conocer de cerca estos increíbles medios con los que cuenta el Ejército de España y la calidad humana de nuestros militares. ¡Sin duda, una experiencia única, difícil de olvidar!