La ministra de Igualdad, Irene Montero, se ha unido a la costumbre de su compañero, el vicepresidente Pablo Iglesias, de recomendar en las redes sociales películas o series de contenido social y que avalan los intereses de su ministerio. Pero en este caso, ha provocado un aluvión de críticas en su contra en las redes sociales.
Irene Montero ha elogiado la película Pride, una comedia inglesa de 2015 que cuenta como un grupo de activistas de los derechos de los homosexuales en Reino Unido en el año 1984 se une a las famosas protestas de los mineros frente a la Policía y las políticas de Margaret Thatcher, provocando una revolución en el pequeño pueblo de la Inglaterra profunda a la que llegan.
Lo que trata de reivindicar esta película es que la lucha de los derechos de un grupo social tiene ser solidaria también con los movimientos reivindicativos de otros derechos o grupos sociales.
Es decir, su mensaje no deja de ser un llamamiento a que el movimiento feminista se una a la lucha de los derechos de gays y lesbianas, consciente de la ruptura que está provocando en estos grupos su ley Trans y la ley LGTBI.
"Claro que en los barrios obreros hay personas LGTBI. Les pasa que no les alquilan un piso por ser lesbianas. Que les dan una paliza por ser trans, que se burlan de ellos en el cole o en su curro. ¿Aún hay quien piensa que los derechos LGTBI son “simbólicos” y no materiales?", asegura Montero con el tráiler en español de esta magnífica comedia británica.
Sin embargo, las redes se han vuelto en su contra recordándole de nuevo que habla de barrios obreros viviendo en una chalé en una zona tranquila de Galapagar y además, en cierta forma, criminalizándolos.
Muchos le preguntan si también en su zona hay estos problemas y otros le recuerdan que el problema en los barrios obreros es la pobreza y la falta de infraestructura más que la intolerancia.
Entre las críticas, varios de los dirigentes de Ciudadanos han denunciado esta alusión a los "barrios obreros que defendía" y los prejuicios de si son así de "intolerantes" como Montero los pinta, como Toni Cantó o Melissa Rodríguez.