Las noches de fiesta en discotecas, que ahora parecen tan lejanas, pueden ser muy divertidas o terminar de forma dramática. Alcohol, oscuridad, gente desconocida... Los peligros sobran y, por desgracia, las mujeres están más expuestas a sufrir ciertos tipos de delitos como son las agresiones sexuales. Ir siempre acompañadas de amigas o tapar el vaso del cubata con la mano para evitar ser drogadas son costumbres que se han normalizado para tener una mayor sensación de seguridad.
Cansadas de ese temor constante a que alguien les metiese algo en la copa, Christine y Nicole, dos jóvenes de 23 años de Long Island (Nueva York) decidieron crear algo cómodo y que tapase los vasos para poder disfrutar de sus noches de fiesta. Así nació My Cup Condom, un 'condón para los vasos' al que se le hace un agujero con la pajita para poder beber cómodamente.
"Siempre había sido una paranoica de que me pudiesen fastidiar en un club o en un bar durante la universidad, ya que mi madre, mi prima y muchas de mis amigas habían sufrido abusos antes. Estaba aterrorizada de que me pasara a mí", explica Nicole, una de las cofundadoras de My Cup Condom, a MagasIN.
"Pero, la historia principal que me inspiró a idear un producto que protegiese las bebidas de contaminantes no deseados fue la de una mujer de mediana edad que fue a un bar popular de mi ciudad natal un martes por la noche con sus amigos y fue drogada, secuestrada, violada y golpeada. Cuando me enteré de que a una mujer de mediana edad le había ocurrido eso, en una noche entre semana y en un bar al que mis amigos y yo vamos todo el tiempo, supe que le podía pasar a cualquiera".
Nicole estaba en su último año de universidad cuando creó My Cup Condom y recibió la ayuda de antiguos profesores para poner en marcha el proyecto, así como una "pequeña subvención". Finalmente, los 'condones de vaso' salieron al mercado hace unos pocos años y Nicole cuenta que "desde el momento en que lanzamos este producto, despegó como la pólvora y es increíblemente popular".
Así, la empresa cuenta con casi 400.000 seguidores y más de 10 millones de 'me gusta' en su página de TikTok. "Todos los que lo ven, lo quieren. Es asombroso ver cómo la gente quiere tener el control y protegerse de este problema social".
Y es que, aunque este producto está destinado principalmente a mujeres, Nicole asegura que también hay muchos hombres que lo compran, ya que ellos también pueden ser víctimas de estos delitos.
Lo mejor de My Cup Condom es que es fácil de llevar (literalmente parece un condón), se adapta a cualquier tipo de recipiente y es reutilizable. Está hecho con material biodegradable (látex de caucho 100% natural, tal y como apunta Nicole) y es apto para tocar la bebida. Además de proteger la consumición de drogas indeseadas, también evita que se derrame -algo muy habitual en las fiestas-. "Nuestra misión es mantener la bebida segura y protegida sin dejar de ser conscientes del impacto en el medio ambiente".
Ventas pese a la pandemia
Desde 2020 la pandemia ha hecho que las fiestas y noches de discoteca estén muy restringidas. Pese a todo, la cofundadora de My Cup Condom asegura que incluso en este tiempo "nuestro producto ha demostrado ser muy popular". "Muchas personas lo han usado en casa para proteger sus bebidas de derrames, otros en barbacoas o pequeñas reuniones. ¡Fue increíble ver que las ventas seguían fluyendo y que la gente seguía utilizándolo!".
Conscientes del daño que han producido estas restricciones a los negocios de miles de personas, My Cup Condom destina desde diciembre de 2020 el 100% de los beneficios del merchandising (camisetas, pegatinas y gorras) directamente al BarStool Fund. Esta fundación apoya a pequeñas empresas de EEUU que han sufrido pérdidas importantes. "Estamos orgullosas de apoyar a Barstool Fund y ayudar a esas personas trabajadoras".