Ocho test para saber si tu película favorita discrimina a las mujeres
El test de Bechdel, la prueba de la lámpara sexy, el principio Pitufina... analizan la construcción y el tratamiento de los personajes femeninos.
24 febrero, 2022 10:47Noticias relacionadas
El primer estudio mundial sobre personajes femeninos en películas populares, presentado en septiembre de 2014, ya revelaba una discriminación arraigada y unos estereotipos generalizados sobre las mujeres por parte de la industria cinematográfica.
El Instituto Geena Davis sobre Género en los Medios, con el apoyo de ONU Mujeres y la Fundación Rockefeller, fue quien encargó el estudio. Este reveló que, pese a que las mujeres representan la mitad de la población mundial, son menos de una tercera parte de los personajes con líneas de diálogo son mujeres.
Si bien la construcción de los personajes femeninos y su presencia en escena ha evolucionado, como muestran estudios posteriores, proponemos que te pongas las gafas violetas y analices a las mujeres en pantalla. Ahora bien, puede que por el propio argumento, tu película favorita no supere alguna de las pruebas, así que te proponemos ocho test:
Test de Bechdel
El test de Bechdel es el método más popular para evaluar la brecha de género en las películas y otras producciones artísticas. La propia Bechdel menciona como precedente Una habitación propia (1929) de Virigina Woolf, que critica que en la mayor parte de la literatura la presencia femenina se debe a su vínculo con un personaje masculino.
Por eso propone revisar los siguientes requisitos:
- Que haya dos mujeres en la historia.
- Que hablen entre sí.
- De algo que no sea un hombre.
Cualquier película de la trilogía original de Star Wars caería en esta prueba. El filme solo muestra tres personajes femeninos que tienen diálogo, pero en ningún momento mantienen una conversación: la princesa Leia, la tía Beru y Mom Mothma, líder de la Alianza.
Test Mako Mori
El test de Mako Mori es parecido al test de Bechdel. El primer paso para realizar la prueba es comprobar que hay un personaje femenino, este tiene que tener un arco argumental propio y, por último, su narrativa tiene que estar relacionada con la del hombre.
Por tanto, si el test de Bechdel estudia la presencia de las mujeres, el de Mako Mori analiza su presencia útil en el filme.
Se inspira en la película Pacific Rim. En la cinta de Guillermo del Toro aparecen varios personajes femeninos que no llegan a mantener un diálogo entre sí. Sin embargo, se considera que el personaje de Mako Mori tiene suficiente presencia para aprobar la representación femenina.
Test de la lámpara sexy
La escritora y guionista Kelly Sue Deconnick propone este test para saber si un personaje femenino está lo suficientemente desarrollado. Esta prueba ayuda a reflexionar sobre la importancia de dar fondo y narrativa propia a los personajes femeninos para que no queden como un mero apoyo a la redacción.
Sue plantea analizar las escenas en las que hay una mujer y pensar si esta podría ser reemplazada por una lámpara sexy sin que esto afecte al argumento.
Si la trama no cambia ¿por qué no poner una lámpara en lugar de contratar una actriz? Por ejemplo ¿por qué no sustituir a Vanessa en la primera película de Deadpool por una lámpara y sus diálogos por un pósit?
Principio de la Pitufina
Katha Pollitt propone la prueba en un ensayo para el New York Times (1991). El principio toma el nombre del personaje femenino de la serie de historietas Los Pitufos, Pitufina.
Este principio invita a detenernos a analizar las películas en las que hay un grupo de hombres y una única mujer, esta suele aparecer de manera estereotipada. Se ofrece un prototipo de mujer irreal y aspiracional. Los ejemplos varían desde la Pitufina en Los Pitufos a Letty en Fast&Furious, pasando por Ariadne en Origen.
Este concepto también fue analizado por Anitta Sarkeesian, que argumentó que el recurso narrativo es nocivo porque solo ofrece una visión limitada de lo que debe ser una mujer, además de que establece lo masculino como norma y lo femenino como la excepción.
Damisela en apuros
Cuando analizamos el papel de las mujeres en el cine, no solo debemos observar su construcción, también el lugar que ocupan en la historia.
Las mujeres aparecen en reiteradas ocasiones como las víctimas perfectas para que el antagonista las maltrate y que el protagonista las salve.
Cualquiera de las tradicionales películas de princesas de Disney caería en esta prueba. Desde La Bella Durmiente a La Sirenita, con excepciones como Mulán.
Test Ellen Willin
La prueba de Willis es una propuesta de la crítica de música pop Ellen Willis. Es un test bastante rápido y sencillo que no tiene un origen cinematográfico.
Willis reflexionó sobre el machismo que hay en el Rock and Roll e ideó un método con el que evaluar la brecha de género en las canciones. Lo que hacía la crítica era escoger una canción escrita por un hombre sobre una mujer e invertir los sexos.
El método pasó a utilizarse también en el ámbito cinematográfico y ahora nos permite darnos cuenta de hasta qué punto los personajes femeninos están bien construidos preguntándonos: ¿Si cambiamos el sexo de los protagonistas de una película, el argumento sigue teniendo el mismo sentido?
Hay guiones que por contar una historia real no lo pueden cumplir, pero la mayoría de películas acaban cayendo en clichés. Sin embargo, entre las películas que superan la prueba está la saga de Harry Potter.
Test de Tauriel
Este test también es bastante sencillo: se cumple cuando aparece una mujer en la historia que es buena en su trabajo.
“La idea de la prueba parte de que las mujeres son representadas regularmente como desconcertantes, horribles y tal vez poco buenas en sus trabajos. Elegí a Tauriel como línea base porque en Hobbit 2 ella es claramente increíble en lo que hace, hasta el punto en que la elogian por sus habilidades”.
Esta prueba se ha actualizado y se aprueba cuando el personaje femenino no lo deja todo (trabajo) para estar con un hombre.
Test de Finkbeiner
La prueba de Finkbeiner, llamada así por la periodista Ann Finkbeiner tiene su origen en el periodismo científico. La periodista Christie Aschwander propone la siguiente lista de verificación sobre temas que no se deberían mencionar para ayudar a los periodistas, o en este caso, guionistas, a evitar el sesgo de género:
- Que el hecho de que sea mujer sea la característica que más la defina.
- El trabajo de su marido.
- Cómo concilia el cuidado de sus hijos con su actividad laboral.
- Que sea un modelo a seguir para otras.
- Que sea la primera mujer en…
- La manera maternal de relacionarse con sus subordinados.
- Cómo sorprendió la competitividad en su campo.
¿Supera tu película favorita alguno de los test?