Todos conocerán la famosa Ruta de la Seda que el comerciante Marco Polo recorrió a finales del siglo XIII y retrató en la obra El Millón. Inspirada por esta obra, y por Viaje a Italia de Goethe, Vienna Cammarota, una mujer italiana de 72 años, ha decidido volver a recorrer esta ruta de 22.000 kilómetros.
Las islas de Lazzaretti, en la Venecia de la famosa Biennale es el punto de origen de este viaje épico que culminará en Pekín, donde le espera su familia. Un camino que realizará íntegramente a pie para trasladar un mensaje de paz, como ella misma ha explicado. 13.000 millas que la italiana comenzó a recorrer el pasado martes y espera terminar en diciembre de 2025.
En esta trayectoria, pasará por nada más ni nada menos que 15 países diferentes. Un itinerario durante el cual experimentará terrenos y climas muy diferentes a través de países de Europa, Medio Oriente y Asia. Antes de la partida, Cammarota habló para los medios y confesó estar nerviosa y cansada de los preparativos, ya que para ella es lo más estresante: "Siempre es la misma sensación al comienzo de un viaje", declaró.
La aventura
Italia, Eslovenia Croacia, Serbia, Bulgaria, Turquía, Georgia, Irán, Turkmenistán, Azerbaiyán, Uzbekistán, Kirguistán, Kazajistán, Mongolia y, finalmente, China son los países que Vienna Cammarota recorrerá en este viaje tan especial.
Como en el famoso juego 'Qué te llevarías a una isla desierta', la italiana también cuenta con algunos elementos imprescindibles para la ruta: una cámara GoPro para grabar imágenes de sus viajes y un teléfono que incluye una aplicación a través de la cual su médico puede controlar su salud de forma remota. A pesar de que su salud es muy buena, la italiana quiere prevenir cualquier riesgo a su edad.
Para cargar este teléfono utilizará la energía que recoge un panel fotovoltaico que lleva colgado de la mochila. Un millar de postales con imágenes de las maravillas de Italia y una cantimplora con el logotipo del Parque del Cilento, en la región sureña de Campania, son otros de los elementos esenciales que guarda en su mochila.
Las banderas italianas que representan su origen tampoco faltarán. Pero a ellas, añade las de Ucrania, uniéndose con todas aquellas personas que están sufriendo las consecuencias entre la guerra de Ucrania y Rusia. "Unir a las poblaciones" es uno de sus objetivos principales.
Marco Polo partió de Venecia en 1271 a la edad de 17 años y pasó más de dos décadas viajando por Asia. Vienna Cammarota cumplirá 75 años cuando llegue a Pekín. Como embajadora del Archeoclub de Italia, confiesa estar asombrada por los viajes del comerciante. "Amo la historia, la cultura y la arqueología, y camino para ver y contar, pero sobre todo para escuchar", afirmó.
"No tendré como referencia Google Maps, sino que trataré de seguir la narración y la descripción de Marco Polo. La parte más dura será durante los inviernos, particularmente en Mongolia, donde me esperan temperaturas de hasta 20 grados bajo cero", añadió.
Un espíritu incansable
Esta guía de excursiones ha podido conocer de primera mano lugares tan remotos como el Tíbet, Palestina, Israel, la Patagonia o Madagascar durante más de 30 años. Con un amor por el senderismo excepcional y un espíritu incansable, Vienna Cammarota lleva recorriendo rutas sorprendentes sin respiro.
En estos viajes, suele hospedarse los hogares personales de los ciudadanos de los países que visita. En el último, también lo hará: "No porque esté tratando de ahorrar dinero, sino porque quiero tener un contacto directo y poder contar la historia de los países a través de las personas que me hospedan".
Después de haber visitado las ciudades medievales en las regiones del sur de Italia de Campania, Calabria y Basilicata, Vienna Cammarota se anima a una nueva experiencia que recordará por siempre.
"Este viaje sirve para llevar el discurso de la cultura y de la arqueología a todos los lugares, porque solo a través de la cultura podemos llevar la paz a los pueblos", declaró a EFE Cammarota.