Penélope Cruz.

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Belleza

El sencillo truco de las famosas en España para mantener el rostro sin arrugas y brillante todo el año

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La estética y la belleza han evolucionado potencialmente con el paso de los años. No solo la perspectiva que tenemos hacia ellas y la libertad que actualmente les acompaña, sino que muchos de los productos con los que contamos ahora antes no existían. Especialmente, cuando hablamos de avances para tratar imperfecciones más concretas, como las arrugas o líneas de expresión.

Todo ello nos hace pensar en cómo se cuidaban nuestras abuelas para lucir un cutis terso y firme. Mientras que los remedios naturales actuaban como el "milagro" al que todas podían acceder, la realidad es que incluso entonces existían ciertos tratamientos muy poderosos, como es el caso del hielo facial.

Se dice que la reina Cleopatra colocaba trozos de carne de ternera encima de la piel para mantener el cutis terso y libre de flacidez. En la actualidad, este proceso se conoce como face icing y ha llegado a celebrities como Bella Hadid o Georgina Rodríguez.

En qué consiste el 'face-icing'

El face icing, también conocido como terapia de hielo facial, es una práctica de belleza que consiste en aplicar frío en el rostro mediante hielo o herramientas frías como rodillos, globos faciales o incluso cubitos de hielo envueltos en una tela. Este tratamiento se ha popularizado como un ritual de cuidado de la piel debido a sus múltiples beneficios y sus raíces en tradiciones antiguas de belleza, donde el frío siempre ha sido utilizado para mejorar la apariencia de la piel.

El proceso básico del face icing implica frotar hielo suavemente sobre la superficie de la piel durante un período corto de tiempo, generalmente pocos segundos. Este tratamiento actúa de varias formas beneficiosas para la piel, comenzando por la vasoconstricción, que es la contracción de los vasos conductores en la superficie de la piel, que se contraen y se expanden cuando el frío se retira.

Uno de los beneficios más notables del face icing es su capacidad para reducir la hinchazón facial. Muchas personas utilizan esta técnica por la mañana, especialmente después de una noche de mal sueño o de retención de líquidos, ya que el frío ayuda a desinflamar áreas como los párpados, las ojeras o las mejillas. 

El frío también tiene un efecto calmante y antiinflamatorio, lo que lo convierte en una solución natural para personas con piel propensa al enrojecimiento, irritación o acné. Al reducir la inflamación y cerrar temporalmente los poros, el face icing puede ayudar a minimizar la apariencia de los poros dilatados, equilibrar la producción de grasa y calmar brotes de acné activos. Sin embargo, aunque puede ser útil, no es una solución permanente para tratar condiciones severas de la piel.

Otro beneficio destacado es el efecto tensor y reafirmante que proporciona. El frío estimula los tejidos y contribuye a tonificar la piel, creando una sensación de firmeza inmediata. Al mejorar la circulación y el flujo linfático, también puede contribuir a que la piel se vea más joven y luminosa a corto plazo, aunque estos efectos son temporales y deben mantenerse con la repetición regular del tratamiento.

El face icing también puede ser un excelente paso dentro de una rutina de cuidado de la piel, ya que ayuda a que otros productos, como sueros y cremas hidratantes, se absorban mejor. Cuando se aplica hielo antes de estos productos, los poros se cierran a medida que la piel se enfría, atrapando la hidratación y los ingredientes activos más eficientemente en la piel.

Cómo añadir el face-icing a la rutina

A pesar de los grandes beneficios del hielo en el rostro, no debemos olvidar que puede provocar quemaduras por el frío extremo. El contacto prolongado puede causar irritación, quemaduras por frío o sensibilidad, especialmente en pieles muy delicadas.

Además, en el caso de las pieles sensibles o con condiciones como la dermatitis, el hielo puede irritar la piel. Por ello, su aplicación debe ser cuidadosa, y siempre debemos observar las respuestas de nuestra dermis.

El hielo se puede integrar en la rutina de cuidado facial, siempre y cuando vaya cubierto por una toalla o un paño de algodón que sirva para proteger la piel del contacto directo con el hielo. Sin embargo, las famosas tienen otro modo de aplicación y es hundir el rostro en un cubo con agua helada.

La hora del día dependerá de nuestra disponibilidad y de lo que busquemos, la terapia de hielo en cara por la mañana nos ayudará a reducir la hinchazón y a preparar la piel para el día, mientras que hacerla por la noche aliviará la tensión acumulada en tu rostro durante la jornada.