Qué son las parejas 'yoyó': así es el nuevo concepto de relación que es tendencia en España
- Una nueva tendencia cada vez más habitual, pero que ha incrementado en los últimos años debido a diferentes factores.
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En las relaciones de pareja, las discusiones son algo a lo que vamos a tener que acostumbrarnos. A pesar de que el amor sea sano, las diferencias y los desacuerdos siempre van a existir, incluso siendo dos personas completamente parecidas en cuanto a personalidad.
Los expertos coinciden en que tener discusiones es lo más normal del mundo e, incluso, un indicativo de que la relación es sana; sin embargo, el problema aparece cuando se convierten en peleas y estás se repiten sin éxito. Lo tóxico no es discutir, sino caer en un bucle.
En este bucle viven las nuevas parejas 'yoyó', también conocidas como relaciones intermitentes, en las que las discusiones y diferencias se vuelven algo constante, por lo que el amor 'acaba' y 'empieza' constantemente.
En qué consisten las parejas 'yoyó'
Las parejas yoyó son relaciones caracterizadas por un patrón repetitivo de ruptura y reconciliación entre dos personas. A diferencia de las parejas que enfrentan problemas y los resuelven para fortalecerse o de aquellas que deciden separarse y toman caminos diferentes, las parejas yoyó alternan constantemente entre estar juntas y separadas.
Este ciclo puede variar en intensidad y frecuencia: algunas parejas pueden reconciliarse y romper varias veces en un corto período, mientras que otras pueden tener tiempos largos de ruptura antes de regresar. Sin embargo, lo que lo define es el carácter cíclico, como el movimiento de un yoyó, que representa una inestabilidad emocional constante.
Existen múltiples factores detrás de esta dinámica, siendo el apego emocional y la dependencia afectiva algunas de las razones más comunes. En muchas parejas yoyó, una de las personas, o ambas, pueden tener dificultades para desapegarse del vínculo debido a una fuerte necesidad emocional que sienten cuando están lejos.
A menudo, al separarse, experimentan un vacío o una falta de propósito que las lleva a echarse de menos de forma intensa, motivándolas a intentar una reconciliación. Pero al poco tiempo de estar juntos nuevamente, es usual que reaparezcan los problemas previos que originalmente habían causado la ruptura.
Este ciclo puede crear una ilusión de que el amor entre ambos es muy fuerte, ya que siempre regresan el uno al otro, pero en realidad las parejas yoyó construyen una relación que no logra evolucionar, quedando atrapada en un mismo punto de conflicto.
A nivel emocional, estar en una relación yoyó es agotador para ambas personas, puesto que por lo general la pareja se caracteriza por discusiones o distinciones que consiguen que la ruptura vuelva a suceder una y otra vez.
En estos casos, las redes sociales han influido mucho, ya que son las que permiten que el contacto constante continúe. Esto permite que una de las personas, o ambas, se sigan comunicando, generando una especie de ilusión de cercanía y manteniendo un vínculo que nunca se termina de cortar del todo.
También, el contexto social, donde la presión de los amigos, la familia o incluso de la propia percepción de lo que "debería" ser una relación puede llevar a que las personas vuelvan a intentarlo, aunque en el fondo no sientan que la relación tiene un futuro real.
Por qué surgen las parejas 'yoyó'
Una de las razones principales detrás de estas relaciones es el miedo a la soledad. En muchas ocasiones, las personas que forman parejas yoyó prefieren estar en esta relación inestable antes que enfrentarse a la incertidumbre de la soltería o el proceso de rehacer su vida sin pareja.
En ocasiones, ambas personas sienten que no encontrarán a nadie más que las entienda de la misma manera, lo cual fortalece esa idea de que son el uno para el otro, aunque las rupturas constantes indiquen lo contrario.
A nivel psicológico, puede surgir lo que se llama la "profecía autocumplida": el temor a no encontrar a alguien mejor o a estar solos lleva a que permanezcan en esta relación tóxica, y al quedarse ahí, confirman su creencia de que estar solos sería peor.
Salir de una relación yoyó no es fácil, ya que implica romper con una rutina emocional a la que las personas se han acostumbrado, aunque sea perjudicial. Requiere una introspección profunda y, a menudo, ayuda externa, como la terapia psicológica, para identificar y trabajar las causas subyacentes de esta dependencia emocional.