Elizabeth, la hermana de Nietzsche que le acercó al nazismo y fundó una colonia en Paraguay
Begoña Quesada se adentra con el libro Nacidos después de muertos en la desconocida figura de Elizabeth Förster-Nietzsche, la hermana del famoso filósofo muy vinculada al nazismo.
6 octubre, 2021 01:19Noticias relacionadas
Se podría decir que Elizabeth Nietzsche (1846-1935) solo quería una cosa en su vida: ser como su hermano mayor Friedrich. Solo se llevaban dos años, pero siempre le tuvo en un pedestal. Era inteligente, único, brillante. Le leía libros clásicos y con él mantenía conversaciones profundas. Sin embargo, a ella no se le permitió acercarse lo más mínimo a ese propósito. No podía leer los mismos libros que su hermano, debía acudir a escuelas de señoritas, aprender a bordar, cocinar... Pero a pesar de todas las trabas sociales, terminó por codearse con la clase intelectual de la época y teniendo un papel clave en las últimas publicaciones de su hermano.
Compleja, inteligente y ambiciosa, la figura de Elizabeth siempre se ha mantenido a la sombra del famoso filósofo alemán. Ahora, Begoña Quesada se adentra en su historia con Nacidos después de muertos (Rasmia Ediciones). Aunque es un libro de ficción, está muy bien documentado e intenta poner en contexto a Elizabeth, una mujer que nació en la época equivocada y que es conocida principalmente por sus vínculos con el nazismo.
"Es una mujer poliédrica, es decir, humana. Elizabeth tiene esa parte manipuladora, trepa y ambiciosa en el sentido negativo de la palabra. Hace lo necesario para lograr lo que quiere, consigue un doctorado para que la metan en determinados círculos intelectuales, consigue ser candidata al Premio Nobel de Literatura varias veces... No tiene límite en esa ambición. Por otra parte, hay que situarla en su contexto: es una mujer inteligente, fuerte, valiente, con carácter, atrevida, creativa, una crack del marketing. Ella creó estas figuritas de Friedrich Nietzsche en silla de ruedas para venderlas en el Archivo y conseguir dinero, lo que viene a ser el merchandising de la época y todo esto a principios del siglo XX. Tienes muchos valores y también un lado muy luminoso", explica Quesada a MagasIN.
Ante la imposibilidad de poder dedicarse a la vida intelectual porque "no era propio de señoritas", Elizabeth encontró en la vida social una forma de "supervivencia", codeándose con personalidades como Richard Wagner. "Era un animal social en ese sentido y yo creo que llegó un momento en el que se dio cuenta de que ahí estaba su supervivencia porque si no estaba condenada a ser 'la esposa de', a casarse, cuidar de su casa... Ella brillaba en ese mundo de las tertulias y de los cafés".
A pesar de todo, Elizabeth no conseguía alejarse de la sombra de su hermano, y cuando publicó sus polémicas ideas sobre la muerte de Dios, ambos fueron expulsados de estos selectos círculos sociales. De nuevo, Elizabeth se había quedado sin la dosis de conocimiento que tanto ansiaba.
"La expulsan sin juzgarla ella por sí misma, sino por su hermano. Siempre había existido una buena relación entre ellos porque Friedrich desprende una luz que a ella le ilumina, está dispuesta a tener este papel secundario porque le llega la luz. En el momento en el que a él le expulsan de ese 'paraíso' le entra frío y se pregunta qué será de ella. Además, Friedrich empieza una especie de peregrinaje por el sur de Alemania, Italia... Es ahí cuando ella vuelve a intentar incorporarse en los círculos de Richard Wagner, donde realmente se está cociendo el antisemitismo", explica Quesada.
Nueva Germania
En 1885, Elizabeth se casó con Bernhard Förster, un maestro de enseñanza media que compartía esas ideas antisemitas. Es entonces cuando la relación con Friedrich se rompe por completo, ya que él no quiere tener nada que ver con ese pensamiento.
Elizabeth se mudó con su marido a Paraguay con la idea de crear un asentamiento ario "puro". Convencieron a 14 familias alemanas y crearon la colonia Nueva Germania. Después de unos años la colonia fue decayendo debido principalmente a problemas con los cultivos y enfermedades. Entonces, coincidiendo con la decadencia de Nueva Germania y después de la muerte de Förster, la madre de Elizabeth le avisó de que Friedrich estaba muy enfermo y ella regresó a Alemania para cuidar de él.
"Ahí tienes a una Elizabeth cada vez más fuerte con un Friedrich cada vez más débil por cuestiones de salud. Seguro que en su relación se le dio la vuelta a la tortilla hasta el punto de que él despreciaba mucho a las escritoras y acaba teniendo libros que en el fondo están escritos por una mujer: su hermana. Es un poco irónico". En este sentido, algunos expertos atribuyen importantes obras del filósofo como La voluntad de poder, en gran parte a su hermana, que habría enfocado el contenido más hacia la ideología nazi.
"Hay grandes expertos que chocan en su versión de hasta qué punto Nietzsche desarrolló un pensamiento más o menos próximo a la ideología nazi, pero yo creo que La voluntad de poder es sobre todo Elisabeth", comenta Quesada, que añade: "Es Elizabeth recogiendo notas con pequeñas frases porque su hermano ya estaba muy enfermo. Eran como tuits, papeles que tiraba al suelo, ella recogía e hilvanaba. Entonces claro, no es lo mismo colocar por ejemplo un 'pero' a principio de frase que la mitad, según cómo las unas va a cambiar mucho el significado".
Tras la muerte de su hermano en 1900 ella siguió publicando textos y se volvió seguidora del partido nazi. En 1933, cuando Adolf Hitler llegó al poder, el partido nazi apoyó económicamente el Archivo Nietzsche, lo que distorsionó la figura del filósofo. Finalmente, Elizabeth Nietzsche murió en 1935, y a su funeral acudieron importantes mandos del partido del Führer.