Lilian Tintori ha denunciado haber recibido “malos tratos” por parte de efectivos de la Guardia Nacional en la visita dominical a su esposo, el líder opositor venezolano Leopoldo López, preso en la cárcel militar de Ramo Verde. “Me desnudaron otra vez”, ha dicho en una entrevista con el canal colombiano NTN24.
En su relato, Tintori ha contado con detalle cómo fue requisada por dos mujeres militares en un cuarto “especial” de la prisión. Le pidieron que se quitara los zapatos, el pantalón, la camisa, la ropa interior, que se volteara. “Tenía la menstruación, me revisaron la toalla íntima. No podía creer lo que estaba pasando”.
Esta no es la primera vez que ella denuncia vejaciones por parte de los responsables del recinto militar donde Leopoldo López cumple una condena de casi 14 años por su participación en las protestas contra el gobierno de Nicolás Maduro en 2014. En octubre de 2015 Tintori aseguró que los militares le pidieron que se desvistiera y que luego saltara y gateara. Pero para ella, lo del pasado domingo es mucho más grave.
La activista por el derecho de los presos políticos ha contado entre lágrimas que su suegra, Antonieta Mendoza, también fue desnudada en frente de sus nietos, Manuela (6 años) y Leopoldo (3 años), hijos del líder de Voluntad Popular.
“Me obligaron a entrar con los niños. Entré y me desnudaron completa. Manuela no podía creer lo que estaba pasando a su abuela. Es una imagen que le quiero borrar”, ha relatado Mendoza en la misma entrevista. “Es inaceptable que eso pasó frente a dos inocentes, que iban con la ilusión de ver a Leopoldo”.
Ambas han exigido “un sistema carcelario digno” y aseguran que han vivido lo que sufren a diario las familiares de los presos políticos y presos comunes en Venezuela. También han responsabilizado a Nicolás Maduro de lo que le pueda suceder a López después las denuncias, justo en momentos en los que se discute la Ley de Amnistía para los presos políticos en la Asamblea Nacional venezolana.
La oposición pide que se liberen a más de setenta presos políticos que permanecen en las cárceles venezolanas y que la amnistía abarque a más diez mil perseguidos y exiliados venezolanos. El oficialismo, por su parte, ha propuesto crear una comisión de la verdad que investigue los hechos violentos en los que fallecieron decenas de personas. Desde el chavismo se responsabiliza a la oposición por esas muertes. “Es imposible la paz sin justicia”, ha dicho al respecto el presidente Maduro.