Después de que el multimillonario Donald Trump se anotase su tercera victoria electoral consecutiva esta semana, sus dos principales rivales, los senadores Ted Cruz y Marco Rubio, se lanzaron a por él en el debate celebrado este jueves en Texas.
“Donald, has contratado un número significativo de gente de otros países para puestos que podrían haber ocupado estadounidenses”, dijo Rubio al magnate inmobiliario, quien defiende entre otras medidas anti-inmigración obligar a las empresas a contratar primero a trabajadores nacionales o hacer más difícil para los extranjeros obtener un visado de trabajo.
Cruz, que se encontraba en el estado al que representa en el Senado federal, aseveró que Trump no podría hacer frente a la demócrata Hillary Clinton si se enfrentase con ella en las elecciones generales. “Dios mío, Donald, tú le diste 100.000 dólares a la Fundación Clinton…”, le dijo.
El magnate, sin embargo, no se quedó parado y se defendió de las embestidas de sus competidores. Ridiculizó a Cruz por sólo haber ganado en Iowa. “Sé que estás avergonzado, pero sigue luchando”, le dijo.
Cuando Rubio le dijo que estaba repitiendo sus palabras, Trump le devolvió la estocada. “Lo vi repetirse cinco veces hace cuatro semanas y, te lo aseguro, fue un colapso. Lo vi derrumbarse en el estrado como nunca había visto a nadie”, respondió Trump en referencia a la intervención de Rubio en el anterior debate, que fue ampliamente calificada de “robótica”.
Los aspirantes a la nominación del Partido Republicano se verán las caras de nuevo en las urnas en el Supermartes, el próximo 1 de marzo, cuando más de una decena de estados celebran primarias y caucus.