Ni la histórica visita de Barack Obama a la isla caribeña el pasado marzo ha impulsado una mejora destacable en la realidad cubana, ha subrayado este jueves en Madrid Guillermo Fariñas, líder de la disidencia cubana y Premio Sajarov de Derechos Humanos del Parlamento Europeo: “La situación en Cuba ha cambiado, pero para peor. Los arrestos [arbitrarios de opositores] han aumentado y [de seguir así] habrá entre 12.000 y 13.000 arrestos a finales de años; el año pasado fueron 10.000”, ha ejemplificado.
Asimismo ha subrayado la “calidad negativa” de los arrestos, un “mayor nivel de golpiza”, tortura y encarcelamiento. Y ha ofrecido otro dato: si tras la excarcelación de la mayoría de los presos políticos del llamado “Grupo de los 75” en 2010 quedaron 43 presos políticos, ahora hay entre 103 y 107.
Al igual que hace más de cinco años los líderes de la disidencia cubana como Yoani Sánchez o Berta Soler insistían en denunciar que la supuesta apertura del Gobierno castrista era sólo maquillaje, este martes Fariñas ha incidido que las relaciones con Estados Unidos es sólo una política de gestos y mientras Washington hace concesiones, en Cuba no cambia nada.
Fariñas está de visita relámpago en Madrid por dos días junto al líder del principal partido de la oposición cubana UNPACU, José Daniel Ferrer; el secretario general de la Confederación de Trabajadores Independientes de Cuba, Iván Hernández; y el presidente de la Asociación Jurídica Cubana, Wilfredo Vallín. Anteriormente han estado en la sede de Naciones Unidas en Ginebra, donde se han podido reunir con los relatores de la ONU responsables de los asuntos detenciones arbitarias así como el de libertad de expresión y asociación.
Tanto para Ferrer como Hernández, que formaron parte de los pocos presos del Grupo de los 75 que no quiso la excarcelación a cambio de salir del país para siempre, es la primera vez que salen del país. A pesar de ello, los líderes opositores no lo consideran significativo en cuanto a un avance en los derechos humanos de la isla, que es en lo que inciden estos disidentes del régimen castrista. En este sentido piden a los políticos españoles, al igual que a todos los “gobiernos democráticos”.
Aviso y petición a empresarios españoles
Este jueves esperan reunirse con representantes políticos de los distintos partidos, en una reunión coordinada por el diputado popular Teófilo de Luis, aunque no saben qué otros representantes acudirán puesto que el viaje a Madrid fue una decisión de última hora, defienden. Ferrer se reúne por su parte con el diputado de Ciudadanos Fernando Maura, ha indicado.
Los encuentros son para exponerles cómo ven ellos la situación en Cuba y presentarles un documento acordado por la oposición cubana en Suiza bajo el título “Petitorio de Ginebra”. En él reclaman a los países democráticos interesados en estrechar sus relaciones con Cuba que “la exigencia del respeto a los derechos humanos” sea “prioritaria” en toda negociación política, económica y bilateral.
Igualmente piden a las empresas extranjeras que quieran invertir en la isla o ya estén presentes en ella que ofrezcan los mismos derechos laborales que dan en su país de origen, pues denuncian que todas -incluidas las españolas- se pliegan al sistema castrista, que -entre otros abusos- se lleva el 95% del salario de cada trabajador para la Administración.
El líder sindicalista Hernández denuncia que ni UGT ni CCOO han querido solidarizarse nunca con los sindicalistas independientes cubanos, a quienes sin embargo no ha contactado para intentar un acercamiento en la presente visita. Por el contrario, la Organización Internacional de los Trabajadores (OIT) sí ha apoyado en Ginebra las preocupaciones sobre la precaria situación laboral de los trabajadores cubanos, que a veces trabajan incluso a 16 horas al día para ganar un poco más de dinero.
“No es que no existan las leyes, sino que los que gobiernan, las pisotean”, han denunciado los opositores, que han advertido a los empresarios españoles que revisen la situación en la isla.
Fariñas ha opinado que las empresas españolas deben tener “cuidado”, porque en cualquier momento las pueden intervenir -igual que a las demás empresas extranjeras- e “igual que se hizo en el pasado”.
La crisis venezolana repercute directamente en Cuba
El líder de la oposición politica José Daniel Ferrer ha afirmado que “la solidaridad [que piden] con los demócratas cubanos o en cualquier parte del mundo [con regímenes autoritarios], no es sólo por una cuestión moral sino también práctica”. En su opinión, “en América Latina se hubieran evitado muchos dolores de cabeza como en Venezuela, si esos regímenes populistas se hubieran [frenado] a tiempo”.
Fariñas ha explicado que ni Rusia ni China suponen en la actualidad un apoyo significativo a la economía cubana. “El único salvavidas económico que nos queda es Venezuela. Imaginen cómo quedará el pueblo cubano, si Venezuela cae por una votación o una guerra civil (…). Va a haber una explosión social”.
El disidente que se hizo famoso mundialmente por su huelga de hambre en 2010 para la liberación del Grupo de los 75 y que a punto estuvo de costarle la vida, asegura que el Ejército venezolano está “tomado por 'asesores' cubanos”.
Mantiene conocer la situación de primera mano a través de profesionales de la medicina y familiares cubanos residentes en este otro país caribeño. “Si Venezuela colapsa, van a existir grandes problemas energéticos en el país. Ahora prácticamente nos regala el petróleo”, ha advertido Fariñas.
Este destacado opositor cubano teme que comiencen de nuevo apagones como en los años 90, cuando se prolongaban hasta 16 horas al día en algunas zonas de Cuba, una situación que se prolongó durante meses. Además, una crisis energética así agudizaría en su opinión el ya de por sí problemático transporte en la isla. “Entonces [en los 90] las personas dormían en las autopistas. Todo eso va a volver”.
Tras su reunión con diputados españoles este jueves, el viernes los líderes opositores cubanos serán recibidos en el Ministerio de Asuntos Exteriores. Después, Fariñas y Vallín regresarán a Cuba, mientras que Ferrer y Hernández seguirán aprovechando su primera salida en toda su vida de la isla para hacer incidencia política en otros lugares. El primero visitará Suecia y Estados Unidos después de haber estado también en Puerto Rico, además de Suiza. El segundo, viajará a Washington para reunirse igualmente con congresistas de ese país.