Arabia Saudita, Egipto, Emiratos Árabes Unidos y Bahrein han roto las relaciones diplomáticas y todos los contactos terrestres y aéreos con Qatar, en lo que supone la crisis diplomática más grave de la región en años.
Arabia Saudita ha explicado que se ha tomado la medida para proteger a sus ciudadanos del terrorismo y extremismo. Además, todos estos países han dado 48 horas a los diplomáticos qataríes para abandonar el país si no, serán expulsados, según publica The Guardian.
La decisión se produce después de que se publicaran unas declaraciones polémicas del emir de Qatar sobre Irán e Israel. Los países del Golfo respondieron bloqueando los medios qataríes incluyendo la televisión Al-Jazeera. Sin embargo, el Gobierno qatarí asegura que se pirateó su agencia estatal de noticias para publicar estos falsos comentarios.
La agencia estatal de noticias saudí ha asegurado que el país ha cortado relaciones diplomáticas "en el ejercicio de su derecho soberano garantizado por el derecho internacional y la protección de la seguridad nacional de los peligros del terrorismo y el extremismo".
Los países árabes han culpado a Qatar de "socavar la estabilidad" y de no cumplir con los acuerdos entre los miembros del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), compuesto por EAU Kuwait, Qatar, Omán, Bahrein y Arabia Saudí.
Por su parte, Qatar se ha defendido afirmando que la decisión se basa en "calumnias" que "no se sostienen sobre ninguna evidencia". Asimismo, asegura que está "comprometido con los acuerdos [del CCG], respeta la soberanía de otros países y no interviene en asuntos internos".
La base estadounidense más grande
Qatar es el país donde está ubicada la base aérea de Al-Udeid, que alberga el comando central del ejército de EEUU en la zona y unas 10.000 tropas estadounidenses. No esta claro si la decisión de Arabia Saudí va a afectar a las operaciones militares estadounidenses.
No es la primera vez que Qatar se ha enfrentado a sus vecinos por su apoyo a los islamistas, concretamente a los Hermanos Musulmanes, un grupo político islámico sunita prohibido por Arabia Saudita y en los Emiratos Árabes Unidos porque desafía el gobierno hereditario.
Los funcionarios occidentales también han acusado a Qatar de permitir o incluso alentar el financiamiento de extremistas suníes como la rama de al-Qaida en Siria, una vez conocido como el Frente Nusra.
La crisis se produce después de la reciente visita del presidente estadounidense Donald Trump a Arabia Saudí para una cumbre con líderes árabes. Desde la reunión, la agitación en la región ha crecido.