Salvini llama "gusanos africanos" a los "asesinos" de Desirée y convoca un acto antiinmigración en Roma
- El ministro del Interior, líder neofascista de la Liga Norte, asegura que "todos serán condenados a cárcel y expulsados de Italia".
- El mitin "por los italianos primero" será el día de la Inmaculada en la plaza del Pueblo, mientras el Papa celebra en la cercana plaza de España.
- El sueño roto de Desirée, la hija del narco violada y asesinada por una ‘Manada’ de ilegales.
El ministro del Interior italiano y líder de la Liga Norte, Mateo Salvini, se felicitaba en la noche del viernes por la detención del cuarto sospechoso de la violación y asesinato de la joven Desirée Mariottini en una casa okupa del barrio de San Lorenzo, en Roma: "Ha sido atrapado en Foggia el cuarto gusano que violó y mató a Desirée, también es un inmigrante africano ilegal", dijo Salvini, "él y los otros tres serán condenados a prisión y serán expulsados de Italia".
Salvini, verdadero hombre fuerte del Gobierno italiano del abogado tecnócrata Giuseppe Conte, ha desafiado a la formación populista con la que comparte Ejecutivo, el Movimiento 5 Estrellas de Luigi di Maio. Concretamente, a su ministro de Justicia, Giuseppe Bonafede, dando por seguro que el "magnífico trabajo" de la Policía bajo sus órdenes, ha dado con los "culpables", que éstos serán "condenados" y que son unos "gusanos africanos" a los que "se expulsará" del país.
El ministro neofascista ha convocando, asimismo, un gran acto público contra la inmigración ilegal el próximo 8 de diciembre en Roma. Salvini dijo que sintió "el odio" del barrio de san Lorenzo y las ansias de "limpieza" de las casas okupas por parte de los "vecinos italianos" del mismo. Según la titular de Administración Pública, Giulia Bongiorno, citada por el diario Il Quotidiano, los habitantes gritaban a Salvini "¡vengan a liberarnos!".
El lugar elegido para el gran mitin en "defensa de las fronteras nacionales" y "por los italianos primero" será la plaza del Pueblo de Roma, un lugar muy especial para el M5S, que interpreta la convocatoria como un desafío directo "en casa". Y es que Salvini, sin nombrarla directamente, culpa en parte de los hechos a la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, miembro también del movimiento fundado por el cómico Beppe Grillo por la "degradación" que le atribuyen de la capital.
Pero el acto que se pretende multitudinario también es una patada a la fiesta más grande de la Virgen para la Iglesia Católica, la Inmaculada Concepción. La grieta profunda en la coalición de gobierno arriesga incluso la ofensa para la Santa Sede, por la fecha elegida y su paralelismo con el caso de la menor de 16 años drogada, violada en manada y asesinada la noche del pasado 18 de octubre en la ciudad eterna.
En la muy cercana plaza de España es tradición que el Papa deposite una corona de flores bajo la estatua de la Virgen en el día de la Inmaculada. Y a Francisco seguro que le escuecen las palabras que a la misma hora esté pronunciando Salvini en nombre de la "defensa de nuestras fronteras y nuestra casa."
Otro de los ofendidos será el presidente de la Cámara de Diputados, Roberto Fico, también del M5S: "La inclusión social debe estar en el centro de nuestras políticas para las grandes ciudades metropolitanas", ha dicho Fico, "porque si no creamos inclusión social, creamos enfrentamiento, conflicto social y ciudades peligrosas. En los barrios más difíciles no hay que dejar a nadie solo".
Salvini piensa, y dice, lo contrario. Y lo hace en alto. Sobre Roma, sobre el barrio de San Lorenzo -donde murió Desirée-, pero no sólo. Oficialmente, el líder de la Liga Norte promete no tener ningún plan de romper la coalición de Gobierno con el M5S, de hecho dice que su Ministerio del Interior va a ayudar "con desalojos", pero la idea que diversos medios italianos ven en el fondo de sus políticas y declaraciones es la de empujar al extremo a los de Luigi di Maio y seguir reforzando su figura de salvador de "la patria de los italianos".