Francia aplica soluciones inéditas para hacer frente a la crisis sanitaria provocada por la pandemia de coronavirus. El ministro de Sanidad del Ejecutivo galo pondrá en marcha un AVE medicalizado (TGV en el país vecino) para trasladar a pacientes con Covid-19 a territorios menos afectados y con más capacidad de hospitalizar pacientes.
Se trata de una medida excepcional que demuestra la solidaridad territorial y la eficacia del sistema sanitario francés, que gestiona directamente el Gobierno central, siendo Francia uno de los países más centralizados del mundo.
El exprimer ministro galo, Manuel Valls, ha elogiado esta iniciativa a través de un mensaje en su cuenta de Twitter: "No entiendo por qué en España no se traslada a los enfermos de la comunidades más afectadas y colapsadas a los hospitales de las que lo están menos. Más solidaridad, menos fronteras internas".
En el país vecino hay 19.856 casos declarados de coronavirus y hasta el lunes habían muerto 860 personas. Desde la pasada semana, Macron decretó unas medidas de confinamiento en todo el territorio similares a las de España, tras fracasar los intentos por evitar aglomeraciones por la vía de las recomendaciones de las autoridades sanitarias.
El sistema sanitario francés no ha dado muestras aún del colapso que sí se está registrando en Italia o España, especialmente en las regiones más afectadas de estos países (Lombardía y Madrid).
Otra de las claves de la estrategia de Francia para luchar contra la letal pandemia es la realización masiva de test. Se han registrado largas colas en los hospitales de varias ciudades tras pedir las autoridades que cualquier ciudadano con síntoma se acercara a su centro hospitalario más cercano.
El ministro de Sanidad, Oliver Verain, ha destacado que se realizan más de 5.000 test de coronavirus cada día, "por encima de la media europea".