De los 700.000 test de Francia al salvoconducto para novios de Italia: las diferencias con España
Italia y Francia sí ponen fechas a sus estrategias de desescalada y advierten de que vigilarán los datos de la epidemia para tomar decisiones.
29 abril, 2020 02:37Noticias relacionadas
España se distancia de sus socios europeos y opta por una estrategia de desescalada sin fechas concretas y por fases. Cada provincia avanzará hacia la nueva normalidad a ritmos distintos según la evolución de la epidemia de coronavirus en cada territorio. En su comparecencia este martes, el presidente Sánchez ha detallado lo que se permitirá y lo que no en cada una de las cuatro etapas hasta alcanzar la nueva normalidad, que podría llegar para toda España a finales de junio.
Francia, que también ha presentado este martes su plan para convivir con el virus mientras llega la vacuna o el tratamiento, ha optado por establecer dos fases y clasificar a los territorios en dos grupos con velocidades distintas. A diferencia del plan de Sánchez, el de Macron si tiene algunas fechas, pero la mayoría del calendario de reapertura está abierto a cambios según evolucione la curva de contagios.
Francia: 700.000 test semanales
-El primer ministro Edouard Philippe ha presentado en la Asamblea la clave de bóveda de la estrategia francesa para salir del confinamiento a partir del 11 de mayo: ha prometido hasta 700.000 test a la semana para controlar la cifra de contagios. En España, Sánchez no ha especificado cuál será la capacidad diagnóstica en la desescalada.
-Los pacientes que den positivo tendrán que aislarse en su casa o en un hotel medicalizado de forma voluntaria, durante al menos 14 días. Aunque Sánchez no lo ha mencionado en su discurso, el Gobierno contemplaba hace semanas aislar a los positivos asintomáticos.
-Se establecerán indicadores a partir del 7 de mayo para categorizar los territorios en verde, donde las restricciones serán menos estrictas y en rojo, donde las medidas de contención serán reforzadas. Es una medida parecida a la estrategia asimétrica del Gobierno de España, que en vez de dos categorías ha establecido cuatro.
-Vuelta al cole progresiva: en contra de lo anunciado por Macron, la vuelta a las clases no será tan rápida. El 11 de mayo reabrirán guarderías y los primeros cursos de primaria. Sólo tendrán que ir los alumnos cuyos padres no puedan teletrabajar y no pueden dejar a sus hijos con un cuidador. Se trata de una estrategia similar a la que plantea España, que sólo contempla algunas excepciones a la apertura del curso escolar en septiembre.
-Viajes, no más de 100 kilómetros: las limitaciones de movimiento se relajan pero no se podrá viajar muy lejos si no hay "razones familiares o profesionales de peso". En el caso de España, las limitaciones de viaje son más complejas: sólo se contemplan los viajes dentro de la provincia y fuera de ella sólo cuando se superen las cuatro fases de la desescalada.
-Bibliotecas y pequeños museos podrán reabrir el 11 de mayo limitando aforo. No así los grandes museos, teatros, cines, salas de conciertos ni centros comerciales. España permitirá una cauta reapertura cultural en la Fase 1.
-Los bares y restaurantes seguirán cerrados. Se tomará una decisión sobre su reapertura a finales de mayo. En el caso de España, que no establece fechas, sí se contemplan reaperturas parciales limitando aforo y en las terrazas en las últimas fases de la desescalada.
Italia: sin diferencias por territorios
El primer ministro italiano desveló el domingo la estrategia para desconfinar el país a partir del próximo 4 de mayo, la denominada fase 2.
-Al igual que Sánchez, Giuseppe Conte no puso un número de test sobre la mesa para la desescalada y el Ejecutivo transalpino se ha limitado a prometer que la capacidad diagnóstica seguirá creciendo para controlar los nuevos positivos en coronavirus. Hasta este martes han realizado ya más 1,8 millones de test, según sus estadísticas oficiales, y planean un estudio de seroprevalencia para 150.000 ciudadanos.
-A diferencia de España, Italia no va a establecer fases en las regiones. Todo el país avanzará al mismo ritmo, pero cada viernes se revisarán los índices de contagio en cada zona y se pueden revertir las medidas de reapertura de forma local según la evolución de la epidemia.
-Viajes y visitas: el Gobierno italiano sí permitirá las visitas familiares desde el lunes próximo, aunque usando mascarillas y evitando aglomeraciones -Conte llegó a recordar que estaban "prohibidas" las fiestas-. Los desplazamientos están permitidos pero sólo dentro de una misma región y por razones laborales o familiares "de peso". El ejecutivo se ha visto obligado a especificar: también los novios con una "relación afectiva estable" podrán reencontrarse.
-Colegios cerrados hasta semptiembre: Conte ha prometido más ayudas para nannys y cuidadoras para las familias que no puedan teletrabajar y no tengan con quien dejar a sus hijos pequeños. Pero los centros educativos no abrirán hasta después del verano, a diferencia de las excepciones que sí han planificado en Francia y España.
- Comercios el 11 de mayo: Podrán abrir todo tipo de tiendas, siempre que trabajadores y clientes puedan moverse en condiciones de seguridad, así pues: con mascarillas, guantes, desinfectantes y distanciados. En cualquier caso, no estarán abiertos los centros comerciales.
-Bares y restaurantes, en junio: a principios de junio tendrían que abrir los bares y los restaurantes que, como cualquier otro sector, tendrán que respetar las medidas de protección y distanciamiento: los camareros tendrán que llevar mascarillas y guantes, las mesas deberán tener una separación de dos metros y hay que estar al menos un metro lejos de la barra.
-Transportes públicos, aviones y trenes: los vuelos y trenes se irán recuperando a lo largo de mayo con distanciamiento social garantizado y mascarillas y guantes obligatorios.