El escándalo del 'doctor cuarentena', el virólogo que rompió sus normas para ver a su amante

Continúa la indignación en Reino Unido después de que saliese a la luz que el principal asesor de epidemiología del gobierno británico, Neil Ferguson, se había saltado sus propias recomendaciones sobre el confinamiento para ver a su amante. El secretario de Estado de Salud, Matt Hancock, ha declarado que "la Policía debería considerar tomar medidas contra el científico".

A pesar de que Ferguson, conocido como el "Professor Lockdown", dimitió después de que The Telegraph revelase sus citas, con las que incumplía el confinamiento, la noticia todavía resuena en los medios del país y muchos le critican por considerar sus acciones hipócritas, sobre todo teniendo en cuenta que él y su equipo del Imperial College de Londres predijeron que más de 500.000 personas morirían por coronavirus si no se tomaban las medidas adecuadas. 

De la misma manera, Ferguson fue contagiado de coronavirus debido a que acudió a muchas reuniones al número 10 de Downing Street con Boris Johnson, quien estuvo ingresado en la UCI durante tres días, y otros miembros del Consejo de Salud. Así, el 18 de marzo anunció en la BBC Radio 4 que se había autoaislado por precaución. 

"He estado en tantas reuniones en las últimas semanas... Creemos que la infección se produce aproximadamente un día antes de que aparezcan los síntomas, y yo estaba en una conferencia de prensa de Downing Street. El punto más serio de esto es que pone de relieve la necesidad de la respuesta que hemos promulgado", afirmó.

Unos días más tarde, el 26 de marzo, enfatizó por Twitter que se debía de tener cuidado para no infectarse ya que "nuestras últimas estimaciones sugieren que el virus es ligeramente más transmisible de lo que pensábamos anteriormente".

También cabe recordar las contundentes respuestas que dio durante una rueda de prensa la doctora Jenny Harries, subdirectora médica del país y miembro del comité de gestión de esta crisis, ante la duda de que parejas que no viven juntas se pudiesen ver: "Si las dos mitades de una pareja se encuentran actualmente en hogares separados, idealmente deberían quedarse en esos hogares".

El Gobierno no quiere "que la gente entre y salga de las casas, eso anula el propósito de la reducción de la interacción social y permitirá la transmisión de enfermedades", añadió la doctora, que también pidió a las parejas que "prueben la fortaleza de su relación". Dicha declaración fue apoyada por Hancock, que agregó: "Ahí tienes. Elige y cíñete a ello".

No ve sus acciones "hipócritas"

Ferguson justificó sus acciones diciendo que "actué pensando que era inmune después de pasar dos semanas de aislamiento". "Acepto que cometí un error y he presentado mi dimisión como consejero del Ejecutivo británico. Lamento profundamente contradecir los mensajes para seguir las reglas de distanciamiento social para combatir a esta devastadora pandemia", añadió al comunicar su renuncia como asesor del gobierno.

Iguamente, Antonia Staats, la mujer con la que quedaba Ferguson, considera, según ha informado The Telegraph, que sus acciones con el epidemiólogo no son hipócritas porque "el hogar es uno mismo", aunque la realidad es que tenía que cruzar la ciudad de Londres para su casa.   

Neil Ferguson y Antonia Staats.

Staats, de 38 años, está casada, tiene hijos y aparentemente mantiene una relación abierta con su marido. Según reveló un amigo a The Telegraph, Ferguson conoce al marido de ella y "comparten interés en la ciencia de datos".

Por su parte, el "Professor Lockdown", de 51 años, también está casado y tiene un hijo, pero se entiende que él y su esposa viven separados. Los medios británicos apuntan a que conoció a Antonia Staats a través de una web de citas OkCupid, hace más de un año. 

Su excelente currículum, manchado

En lo que respecta a su trayectoria profesional, Ferguson es un reputado epidemiólogo y profesor de biología matemática en el Imperial College de Londres especializado en los patrones de propagación de enfermedades infecciosas en humanos y animales. También ejerce como director del Instituto Abdul Latif Jameel para el Análisis de Enfermedades y Emergencias.

Tiene una dilatada experiencia como investigador y asesor durante brotes de enfermedades infecciosas. En el caso de la fiebre aftosa de 2001 trabajó en el equipo dirigido por el profesor Roy Anderson para crear modelos matemáticos utilizados para informar al gobierno del Reino Unido sobre los métodos más efectivos para prevenir la propagación de la enfermedad.

Asimismo, en 2009, cuando se produjo otro brote de gripe porcina, Fergusón publicó junto a otros colegas un artículo en la revista Lancet Infectious Diseases titulado Cierre de escuelas durante una pandemia de gripe", en el que defendían "el cierre de escuelas para interrumpir el curso de la infección, retrasar difundir más y ganar tiempo para investigar y producir una vacuna". Su equipo también informaba sobre las consecuencias económicas y laborales que este tipo de medidas conllevarían.

También participó en 2013 en la investigación sobre MERS-CoV durante el primer brote en Oriente Medio y en estudios sobre enfermedades como el zika o el dengue. En 2014, se desempeñó como director del centro del Consejo de Investigación Médica del Reino Unido y proporcionó un análisis de datos para la OMS en la crisis del ébola en África occidental.

Su impecable trayectoria profesional ha sido manchada públicamente por incumplir sus propias recomendaciones para evitar la expansión del coronavirus que ya ha provocado la muerte de más de 30.000 personas en Reino Unido, situándolo como el país europeo con más fallecidos hasta el momento.