Rusia despliega en el Mar Negro la flota que usó para el transporte de tropas en la invasión de Georgia
El Ejército ruso también ha iniciado ejercicios militares en Bielorrusia, donde ha hecho el despliegue más grande desde la Guerra Fría.
11 febrero, 2022 04:46Noticias relacionadas
La disputa diplomática continúa, pero los movimientos militares también. El Ejército ruso inició este jueves ejercicios militares en Bielorrusia y, además, seis buques de guerra llegaron al mar Negro, concretamente al puerto de Sebastopol, una ciudad portuaria en la península de Crimea, anexionada por Rusia en 2014. Estos últimos movimientos han hecho que se incrementen una vez más las sospechas de una ofensiva rusa contra Ucrania.
Rusia insiste en que son ejercicios militares rutinarios, negando que tiene planes de invadir Ucrania, unas afirmaciones de las que Occidente no se fía. Los barcos que el Kremlin ha enviado a Sebastopol, una zona especialmente estratégica para la OTAN, Ucrania y Rusia, normalmente son utilizados para transportar a tropas, vehículos y material militar. De hecho, algunos de los buques rusos que han sido movilizados participaron en la invasión de Georgia en 2008, señala The Washington Post. Además hay otros dos buques antiminas.
Este último movimiento naval ha encendido las alarmas en Ucrania. El ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, afirmó este jueves, tras conocer este movimiento en aguas de Crimea, que "Rusia continúa su actividad destructiva para desestabilizar la situación de seguridad en la región del mar Negro y mar de Azov".
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— Минобороны России (@mod_russia) February 10, 2022
La presencia naval de Rusia imposibilita a los barcos ucranianos llegar a puertos de su país, según el Gobierno de Ucrania, que insiste en que este movimiento del Kremlin es una forma de "presionar" al mundo.
"Las Fuerzas Navales de las Fuerzas Armadas de Ucrania están preparadas para el desarrollo de cualqueir escenario y provocaciones, para defender al país desde el mar", ha advertido el ministerio de Defensa en un comunicado emitido este jueves.
Gran despliegue en Bielorrusia
Por un lado está la llegada de los buques a Crimea, y por otro las maniobras conjuntas con el Ejército de Alexander Lukashenko. El despliegue de tropas rusas en Bielorrusia no es cualquiera. Son los ejercicios militares de entrenamiento más grandes que ha llevado a cabo el Ejército ruso desde la Guerra Fría. Participan miles de soldados con armas sofisticadas, entre las que destacan misiles S-400, sistemas de defensa aérea y cazas de combate Su-35.
Altos jefes del Ejército ruso volaron hasta la vecina Bielorrusia este miércoles para coordinar las maniobras conjuntas con el Ejército bielorruso, informó The Washington Post. Una señal que Occidente interpreta como una preparación y no como un entrenamiento más. Una espece de calentamiento. Es decir, la puesta a punto de un amplio despliegue de efectivos que están listos para invadir Ucrania en cualquier momento.
Según Bielorrusia y el Kremlin, las tropas regresarán a Rusia cuando finalicen las maniobras. Pero, ¿cuando acabarán? En un principio, tanto Moscú como Minsk afirmaron que el 20 de febrero todas las tropas volverían a sus lugares correspondientes. 10 días.
Sin embargo, este jueves, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, no ha dado una fecha exacta: "En lo que se refiere a la duración, es un derecho soberano de cada Gobierno". Sí aseguró, en cambio, que "es lo habitual" que después de las maniobras las tropas vuelvan a sus cuarteles.
Que el Kremlin diga que no tiene pensado invadir a la antigua república soviética y que los ejercicios militares ya estaba previstos tiene poco valor para Occidente, que no se fía. Y menos con la llegada de los seis buques de guerra a Crimea, una posición que les acerca a la costa sur de Ucrania, lo cual facilita un hipotético ataque.
"Momento peligroso"
La tensión entre Rusia y la OTAN se mantiene en niveles elevados desde que Washington desvelara la presencia de más de 100.000 tropas rusas en la frontera con Ucrania. Y aunque el conflicto se ha mantenido en puro estilo Guerra Fría, con reuniones diplomáticas de alto voltaje cada semana, la realidad es que sigue siendo un "momento peligroso" para Europa, advirtió este jueves el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg.
Stoltenberg afirmó en una rueda de prensa después de reunirse con el primer ministro británico, Boris Johnson, que "el número de fuerzas rusas está aumentando", posiblemente en referencia a los ejercicios militares en Bielorrusia. "Este es un momento peligroso para la seguridad europea".
El secretario general de la OTAN instó a "estar preparados para lo peor" e insistió en que la Alianza "no es una amenaza para Rusia". Además, anunció que este jueves también le envió una carta a Lavrov para invitarle a dialogar "en reuniones entre la OTAN y Rusia".