Rusia exhibe su músculo ante Ucrania e inicia maniobras militares conjuntas con Bielorrusia
El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, insistió hoy en que las tropas volverán a sus bases tras las maniobras en la frontera con Ucrania.
10 febrero, 2022 16:53Noticias relacionadas
Rusia hizo hoy una demostración de fuerza en la frontera con Ucrania con el inicio de maniobras militares conjuntas con Bielorrusia, paso que la OTAN considera contrario a la desescalada entre rusos y ucranianos demandada por Occidente.
En la primera jornada de los ejercicios "Determinación aliada-2020" los aviones de asalto rusos Su-25SM participaron en la eliminación de objetivos del enemigo en un polígono militar de la región bielorrusa de Brest, limítrofe con Ucrania y Polonia.
Se le sumarán en los próximos días los cazas Su-35 y los sistemas de defensa antiaérea S-400, que tienen un alcance de hasta 400 kilómetros, juegos de guerra a los que no acudirá el presidente ruso, Vladímir Putin, según informó el Kremlin.
El jefe del Estado Mayor de Rusia, Valeri Guerásimov, sí viajó a Minsk para presidir las maniobras, que algunas capitales occidentales consideran un posible preludio de una invasión de Ucrania.
Las tropas rusas regresarán a sus cuarteles
El Kremlin reconoció que las maniobras -el mayor despliegue militar en Bielorrusia desde la Guerra Fría, según el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg- son de gran envergadura, pero las vinculó con "las amenazas sin precedentes" a las que están sometidos ambos países.
Con todo, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, insistió hoy en que las tropas volverán a sus bases tras las maniobras, algo que, dijo, no ocurre con el despliegue de soldados y armamento aliado en Europa oriental.
"El que después de maniobras militares las tropas vuelvan a sus cuarteles es lo habitual. En lo que se refiere a la duración, es un derecho soberano de cada Gobierno", dijo en rueda de prensa Lavrov tras reunirse con su homóloga británica, Liz Truss, que demandó el repliegue ruso en la frontera ucraniana.
Lavrov calificó de "drama" que cada día recuerda más a una "comedia" la reacción occidental a las maniobras de las fuerzas de reacción rápida en defensa de la Unión Estatal Rusia-Bielorrusia.
"Dentro de algún tiempo los países occidentales sabrán que los ejercicios terminaron y las tropas regresaron a territorio ruso. Entonces, se armará un gran ruido para aseverar que Occidente arrancó de Rusia una desescalada, aunque en realidad es vender humo", afirmó.
Mientras, añadió, a diferencia de los ejercicios rusos, tras lo que los soldados regresan a sus habituales lugares de emplazamiento, las tropas que EE. UU., el Reino Unido y Canadá envían a los países bálticos y otros estados bañados por el mar Negro no lo hacen.
"Esas tropas y armamento, por regla general, nunca vuelven a casa", subrayó.
Recelos de la OTAN y EEUU
Al anunciar hoy en Bruselas el envío de una carta a Lavrov para reanudar el diálogo OTAN-Rusia, Stoltenberg alertó de la magnitud de las maniobras en Bielorrusia, en las que participan miles de soldados.
"Estamos monitorizando de cerca el despliegue de Rusia en Bielorrusia, que es el más grande desde el final de la Guerra Fría", afirmó.
Resaltó que estamos ante un momento "peligroso" para la seguridad europea y lamentó que el número de fuerzas rusas alrededor de Ucrania "está aumentando" y el tiempo de aviso de un posible ataque "se está reduciendo".
Dicho despliegue incluiría los temidos misiles tácticos Iskander, que según los militares rusos son capaces de superar el escudo antimisiles estadounidense, aunque el Ministerio de Defensa no ha informado de ello.
Por su parte, la Casa Blanca denunció que Rusia ha desplegado ya 5.000 soldados rusos en la frontera entre Ucrania y Bielorrusia, y que planea incrementar esa cifra hasta los 30.000 hombres.
El presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró que Putin le garantizó que no habría una escalada militar en la frontera con Ucrania, aunque el Kremlin negó cualquier posibilidad de acuerdo concreto con un país que no lidera la OTAN.
Ejercicios en el Mar Negro
El jueves también arrancaron los ejercicios de la Armada rusa en el mar Negro, que hay que enmarcar en las mayores maniobras navales desde la caída de la URSS (1991).
Participan seis buques de desembarco, que atracaron en el puerto crimeo de Sebastopol, base de la Flota rusa del Mar Negro, y tres buques antiminas.
"Este tipo de acciones agresivas de Rusia como parte de su guerra híbrida contra Ucrania son inadmisibles", señaló el Ministerio de Exteriores de Ucrania, que remitió a Moscú una nota de protesta por el bloqueo de algunas zonas de los mares Negro y Azov.
Mientras, Lukashenko, quien ha advertido que en caso de conflicto con el país vecino estará en el bando ruso, se mostró hoy "convencido" de que no habrá ninguna "guerra caliente" en Ucrania.
"Si ningún nazi loco en Ucrania organiza una provocación, no combatiremos. No estamos cerca de esa guerra", afirmó.
Evacuación de embajada rusa
Rusia está preparando "activamente" un plan de evacuación de su personal diplomático no esencial de su Embajada en Kiev en medio de la tensión militar entre ambos países, informaron este jueves fuentes diplomáticas rusas en Ucrania a Efe.
"El asunto de que el personal no esencial abandone por un tiempo Ucrania se está preparando activamente", señaló la fuente a la agencia TASS.
Al respecto, el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, aseguró hoy que Moscú recomendará a su personal diplomático abandonar el país vecino dependiendo lo que hagan las Embajadas occidentales.
"No sé qué tienen en mente nuestros colegas anglosajones", dijo durante una rueda de prensa conjunta con su colega británica, Liz Truss.
La prensa estadounidense informó a mediados de enero sobre el comienzo de la evacuación del personal diplomático ruso en Ucrania por carretera, pero el Ministerio de Exteriores ruso lo negó rotundamente.
Eso sí, admitió que diplomáticos, personal administrativo y miembros de su familia son objeto de amenazas constantes, lo que ha propiciado el envío de notas de protesta.
Países como Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Canadá, Australia o Japón expresaron en enero su intención de evacuar a su personal no esencial de las legaciones diplomáticas en Ucrania debido al temor al estallido de un conflicto con Rusia.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, criticó a Occidente por causar pánico de manera injustificada sobre una inminente invasión rusa, aduciendo que su país se encuentra en la misma situación de amenaza militar rusa desde hace muchos años.
"Considero que fue un error y lo digo abiertamente. En esta situación todos deben estar en su lugar", comentó.
Aludió a los diplomáticos griegos destinados en la ciudad de Mariúpol (mar de Azov), que se encuentra prácticamente en la línea de separación del Donbás, escenario de un conflicto desde 2014.
"Los griegos no sacaron a nadie. No quiero comparar países, pero son señales importantes que todo el mundo mira (...). Son capitanes de la diplomacia, representantes de sus países. Y, como sabemos, los capitanes son los últimos en abandonar el barco", aseveró.
Las consultas diplomáticas se han activado en las últimas dos semanas entre Rusia, Ucrania y los países europeos -incluido Francia, Alemania, el Reino Unido y España-, en un intento de allanar el camino para una desescalada.