Putin bombardea Kiev y otras ciudades clave: al menos 11 muertos y más de 64 heridos
Rusia responde al ataque del puente de Crimea con una lluvia de misiles sobre las principales urbes del país.
10 octubre, 2022 07:53La respuesta de Vladímir Putin al ataque al puente de Crimea ha sido la más dura: tras atacar varias veces a Zaporiyia, el líder ruso ha ordenado bombardear esta mañana más de 15 ciudades ucranianas. La lluvia de misiles rusos -83 explosiones, según el ejército ucraniano- ha caído sobre Kiev, Zaporiyia, Leópolis, Dnipro, Jarkov y Kremenchuk, entre otras. El ataque aéreo, el más grande desde el inicio de la guerra, ha dejado al menos 11 muertos y cerca de 64 heridos. Los servicios de emergencia del país siguen trabajando en las zonas afectadas, por lo que aún se desconoce le alcance total de los daños.
Los primeros balances ofrecidos por Rostislav Smirnov, asesor jefe del Ministerio del Interior, citado por la agencia de noticias Ukrinform, hablaban de "ocho fallecidos y 24 heridos" como resultado de los bombardeos en Kiev, la capital ucraniana. Allí también se produjo un incendio en seis automóviles y más de 15 automóviles resultaron dañados.
En su cuenta de Telegram, el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko, precisó que las explosiones ocurrieron "en el distrito de Shevchenskivskyi, en el centro de la ciudad".
Kiev under attack this morning pic.twitter.com/8UOA46I4Hd
— Russiаn Market (@runews) October 10, 2022
También el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se ha pronunciado sobre el ataque en Telegram: "Están tratando de destruirnos y borrarnos de la faz de la tierra; destruir a nuestra gente que duerme en casa en Zaporiyia; matar a las personas que van a trabajar en Dnipro y Kiev. (...) Las sirenas de ataque aéreo no cesan en toda Ucrania. Hay impactos de misiles. Les pido: no abandonen los refugios. Aguantemos y seamos fuertes. Desafortunadamente hay muertos y heridos".
Según el diario Kyiv Independent al menos cuatro explosiones se han escuchado en el centro de la capital esta mañana, poco después de las 8.00, hora local, y, según las imágenes que empiezan a circular en las redes sociales, se ven columnas de humo en el centro de la ciudad. Los testimonios en las redes dan cuenta también de que varios misiles cayeron sobre la Universidad Central de la ciudad y sobre el parque Schevchenko, un parque infantil.
Las sirenas antiaéreas sonaron unos 90 minutos antes del ataque. Esta es la primera vez que Kiev es atacada desde junio y las explosiones también parecen ser mucho más centrales que los ataques rusos anteriores en la guerra.
Este sábado, Ucrania atacó el puente de Crimea, causando varios daños parciales en la única infraestructura que une la anexionada península ucraniana con Rusia. Un día después, Putin acusó a los servicios secretos de Ucrania del "acto terrorista".
"No hay duda de que esto es un acto terrorista dirigido a destruir una infraestructura civil críticamente importante de la Federación Rusa", señaló en una reunión con el presidente del Comité de Investigación de Rusia, Alexandr Bastrikin. "Los autores, ejecutores y clientes son el servicio secreto de Ucrania", explicó Putin.
En represalia, las fuerzas militares rusas atacaron Zaporiyia este mismo domingo, en una acción en la que, según el alcalde de la ciudad, Anatoly Kurtev, diez misiles impactaron en zonas residenciales. Al menos 17 civiles murieron, más de 40 han resultado heridos y varias personas han desaparecido.
Ataques a Leópolis y Dnipro
Además del bombardeeo a Kiev, Rusia ha atacado las ciudades de Leópolis y Dnipro. El jefe de la administración militar regional de Leópolis, Makzym Kozytski, confirmó varias explosiones en el centro de Leópolis esta mañana.
"Residentes de la región de Leópolis, la defensa aérea está funcionando. Permanezcan en los refugios", advirtió a la población en un mensaje en Facebook que recogen medios locales, y advirtió que "hay amenaza de nuevos ataques con misiles".
Según Kozytski, los ataque "se registraron contra instalaciones de la infraestructura energética en la región de Leópolis" y pidió que no se distribuyan fotos, vídeos o cualquier tipo de suposiciones, con el fin de no ayudar a las fuerzas rusas.