El portavoz del Ejército libio ha afirmado que se han hecho con el control de un centro de convenciones que el grupo terrorista Estado Islámico usaba como cuartel general en Sirte, en la costa central libia. En el mismo comunicado el portavoz asegura que también se han hecho con el control del hospital y la universidad de la ciudad.
"El centro Ouagadougou está en nuestras manos", ha declarado. Las fuerzas del Gobierno de unidad nacional reconocido por la comunidad internacional han indicado que todavía hay miembros de Estado Islámico en tres áreas residenciales de la ciudad y en un complejo cercano al Mediterráneo.
Los avances de este miércoles son los mayores registrados en las últimas semanas. Además, estas capturas tienen un gran valor simbólico puesto que el centro de convenciones es un punto de referencia en Sirte y era uno de los objetivos marcados por el Gobierno de unidad nacional. Este edificio fue usado por Estado Islámico para reuniones e instrucción religiosa.
Hace diez días, Estados Unidos anunció que había comenzado a bombardear el bastión de Estado Islámico en Sirte, la ciudad natal del caído Muamar al Gadafi. El Pentágono comunicó que su actividad en el terreno se debe a la petición del Ejecutivo de unidad nacional, que comenzó su ofensiva a la ciudad costera en mayo de este año.
Aparte de EEUU, la coalición internacional que lucha contra Estado Islámico en Siria e Irak no ha intervenido oficialmente en suelo libio. Sin embargo, hay informaciones que apuntan a que Francia, Reino Unido y Estados Unidos han mandado fuerzas especiales a Libia desde mayo del año pasado, según ha informado EL ESPAÑOL, responsable de Defensa en Libia para Austria entre 2007-2012.
El grupo terrorista consiguió asentarse en la ciudad en junio de 2015 aprovechando el desgobierno y los enfrentamientos civiles en el país, donde en paralelo al Gobierno recientemente creado y reconocido por la ONU conviven otros dos ejecutivos enfrentados. Estados Unidos calcula que hay menos de 1.000 terroristas en Sirte, pero es el feudo de mayor importancia fuera de Siria e Ira. Aunque aún no se han confirmado las cifras, al menos 20 combatientes de Estado Islámico han muerto defendiendo el campus universitario, según el Ejército libio.