La jefa de las Madres de Plaza de Mayo tuvo una cuenta bancaria en Cajastur

El escándalo de la supuesta corrupción en torno a Hebe Pastor viuda de Bonafini, la presidenta de la ong argentina Madres de Plaza de Mayo, presenta insólitas ramificaciones en España, que suman opacidad a esta mujer que en los años ‘70 supo ser un emblema mundial de la lucha contra las dictaduras.

La Caja de Ahorros de Asturias (Cajastur) ha admitido ante la justicia argentina que ella mantuvo abierta y activa una cuenta bancaria con el número 20400021163000118059. La cuenta estuvo a nombre de la dirigente social y de una compañera suya en la asociación, María Mercedes Colas.

Por allí pasaron más de 300 mil euros entre 1996 y 2011. Se presume que algunos de esos fondos provenían de las donaciones que hacían el Principado de Asturias y diversos ayuntamientos de España, según el resumen que la entidad envió al juez argentino Marcelo Martínez De Giorgi.

Sin embargo, ha llamado la atención de los investigadores judiciales en Argentina que, luego, aquellos fondos no eran repatriados directamente a Buenos Aires sino que terminaban siendo transferidos a otras cuentas bancarias en el extranjero, radicadas en Miami y Nueva York.

También han despertado sospechas esos movimientos en la cuenta bancaria porque supuestamente habrían sido realizados por Sergio Schocklender, a quien Bonafini colocó como apoderado de la fundación Madres de Plaza de Mayo y autorizó a manejar los fondos de la entidad.

Pero Bonafini cerró la cuenta en Cajastur el 4 de octubre de 2011, meses después de que saltara el escándalo de “Sueños Compartidos”, un programa de construcción de viviendas sociales con fondos públicos que el matrimonio presidencial de Néstor y Cristina Kirchner le entregaron a la fundación.

Orden de captura

Bonafini y Schocklender, más otros 42 integrantes de Madres de Plaza de Mayo y funcionarios públicos, están imputados en la causa penal que instruye Martínez De Giorgi. El juez mandó ayer que se detuviera a la presidenta de la asociación después de que esta faltara por segunda vez a una citación en el juzgado, pero la policía no consiguió detenerla.

Rodeada de legisladores y políticos kirchneristas, entre otros los diputados Máximo Kirchner, hijo de los ex presidentes, y Axel Kicillof, ex ministro de Economía, la dirigente desafió a los policías y al juez encabezando un acto político en la plaza de Mayo. Hasta la mañana de este viernes, no había sido detenida.

Las últimas noticias señalan que los abogados han presentado un escrito asegurando que Bonafini se someterá a la justicia y aceptará ser indagada como imputada. En consecuencia, el juez levantó la orden de detención, le impuso una caución juratoria y la obligación de dar cuenta de sus movimiento al juzgado. Pero no puso nueva fecha para la audiencia de indagatoria. Con lo cual Bonafini sigue imputada de supuesta corrupción pero aún no se sabe nueva fecha para la audiencia de indagatoria.