El líder opositor venezolano Leopoldo López se encuentra de nuevo en su vivienda sometido a arresto domiciliario bajo elevadas medidas de seguridad, menos de una semana después de que fuese encarcelado en un penal militar.
Pese a que han pasado poco más de 24 horas desde el traslado de López, las autoridades de Venezuela no se ha pronunciado sobre la medida otorgada al político. Su abogado Juan Carlos Gutiérrez se limitó a indicar que la presión internacional habría precipitado el regreso a casa.
Sin embargo, Nicolás Maduro tiene su propia versión de los hechos y la compartió esta madrugada desde el programa Domingos con Maduro. El presidente venezolano se ha jactado de haber evitado el asesinato del opositor más emblemático del chavismo. "La extrema seguridad con la que manejamos la seguridad de este señor evitó que eso sucediera. Lo estoy diciendo por primera vez: a Leopoldo López lo iban a matar", aseguró en su alocución televisada.
El presidente venezolano también aprovechó su púlpito televiso para acusar a "entes foráneos" de la rebelión militar en una base del Ejército cerca de la ciudad de Valencia. "Esa factura se pagó desde Miami y Colombia", destacó.
La ONG Foro Penal Venezolano (FPV) ha denunciado recientemente que en Venezuela hay más de 600 personas presas por razones políticas, y ha señalado que esta cifra aumentó seis veces desde que comenzaron las protestas contra el Gobierno de Maduro, que dejan ya un saldo de 121 muertos.