Simpatizantes del Gobierno del presidente Daniel Ortega agredieron este lunes a un sacerdote y a una monja en el interior de la Catedral Metropolitana de Managua, donde al menos nueve madres iniciaron una huelga de hambre por la liberación de sus hijos, denunció la Arquidiócesis de la capital nicaragüense.
El sacerdote agredido, identificado como Rodolfo López, fue golpeado por "grupos violentos afines al Gobierno" que ingresaron y tomaron el control de la catedral, según una declaración pública de la entidad eclesiástica.
La agresión ocurrió después de que el sacerdote y sor Arelys Guzmán increparan a los simpatizantes de Ortega, que respondieron con violencia golpeando al cura y a la religiosa, "quienes se encuentran bien, pero tuvieron que salir del templo para resguardarse".
Profanación de la catedral
En las redes sociales circulan videos sobre la agresión y en ellos se ve cuando un grupo de jóvenes golpea en diferentes partes del cuerpo, incluido el rostro, al sacerdote.
Asimismo, la Arquidiócesis de la capital nicaragüense denunció que esta noche personas de ese mismo grupo rompieron con fuerza los candados del templo, "profanando de esta manera la Catedral Metropolitana de Managua".
"Condenamos estos hechos de profanación, asedio e intimidación que no abonan a la paz y a la estabilidad del país", agregó.
La Arquidiócesis de Managua, que dirige el cardenal Leopoldo Brenes, también pidió al presidente Ortega y a su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo, que adopten acciones inmediatas para que se respeten todos los templos católicos de Nicaragua.
Asimismo, demandó a la Policía Nacional que retire "sus tropas que asedian e intimidad la Catedral y nuestras parroquias".
Policía sitia el templo
La Catedral de Managua está cercada por centenares de agentes de la policía que cerraron las vías de acceso, aunque permitieron el ingreso de los simpatizantes de Ortega y de medios oficiales, según la misma fuente.
Los seguidores de Ortega, que se identificaron como "católicos revolucionarios", protestaron contra la Iglesia Católica por acoger en sus templos a madres que hacen huelga de hambre por la liberación de sus hijos, y advirtieron de no permitirán otra Bolivia en Nicaragua.
Los "católicos revolucionarios", dirigidos por Tomás Valdez, miembro de la comunidad cristiana nicaragüense San Pablo Apóstol, irrumpieron en la catedral después de que al menos nueve madres de "presos políticos" se sumaran a la huelga de hambre que 11 mujeres iniciaron la semana pasada en una parroquia de Masaya para exigir al presidente Ortega la liberación de sus hijos.
Efecto Bolivia
Valdez dijo que los "católicos revolucionarios" no permitirán que la oposición, junto con los sacerdotes, hagan lo que hicieron con el pueblo de Bolivia, donde, según dijo, le dieron un golpe de Estado a Evo Morales, que renunció a la presidencia del país hace nueve días tras ser presionado por las Fuerzas Armadas para dejar el cargo.
Antes de la agresión, los sandinistas entraron a la catedral en medio de gritos, consignas y portando pancartas contra los sacerdotes, a quienes tildaron de "fariseos" e "hipócritas", y los acusaron de promover la violencia y la desunión de los nicaragüenses.
Al menos 20 mujeres están en huelga de hambre por la liberación de sus familiares y en protesta contra Ortega, un grupo de 11 en la parroquia San Miguel Arcángel en la ciudad de Masaya (sureste), y 9 ahora en la Casa Cural de la Catedral de Managua.
Desde abril de 2018, Nicaragua vive una crisis sociopolítica que ha dejado al menos 328 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos locales elevan la cifra a 651 y el Gobierno reconoce 200 y denuncia un supuesto intento de golpe de Estado.
Noticias relacionadas
- Ortega expulsa a una misión de la ONU de Nicaragua
- Nicaragua: el "carnicero" Daniel Ortega toma la ciudad de Masaya tras bombardearla durante siete horas
- 'Exiliada': así cuenta la hijastra de Daniel Ortega cómo abusó de ella desde los 11 años
- Así actúan los 'escuadrones de la muerte' de Daniel Ortega en Nicaragua