El ministro de Economía argentino, Sergio Massa, en una inauguración el pasado viernes en Rosario.

El ministro de Economía argentino, Sergio Massa, en una inauguración el pasado viernes en Rosario. Twitter

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El 'soborno' de Massa para ganar a Milei en Argentina: dar 157€ a los trabajadores antes de las elecciones

El plan de financiación del aún ministro de Economía, anunciado de cara a las presidenciales del 22 de octubre, ya cuenta con la negativa de 12 provincias.

31 agosto, 2023 03:19

Sesenta mil pesos (157€) para cada trabajador que no llegue a los 1.013€ mensuales, o 400.000 pesos. Es la medida con la que Sergio Massa despedirá su mandato como ministro de Economía de Argentina antes de las presidenciales del 22 de octubre, a las que se presenta como candidato de la coalición kirchnerista Frente para Todos.

La iniciativa forma parte de un programa de fortalecimiento económico anunciado esta semana por redes en las cuentas del propio Massa. Ilusionado por "cuidar a las familias argentinas", el ministro propone el plan como una manera de "compensar el daño" de la crisis económica que atraviesa el país, marcada por la hiperinflación y la devaluación del peso.

Un total de 5,5 millones de argentinos percibirá las ayudas en dos cuotas de 30.000 pesos, que se abonarán en septiembre y octubre. Entre ellos habrá tanto trabajadores de empresas privadas como de la administración pública. Además, las empleadas del hogar percibirán un bono similar, solo que de menor cuantía: 25.000 pesos.

En un principio, los bonos serán sufragados por la comisión paritaria, compuesta en igual medida por representantes de trabajadores y la patronal, aunque Massa también ha invitado a los gobernadores de provincias y alcaldías a contribuir. Sin embargo, ya son doce las regiones que han rechazado la oferta.

Teniendo en cuenta que todas ellas están lideradas por la coalición de oposición Juntos por el Cambio (JxC), cabe pensar que los mandatarios provinciales temen que estas contribuciones sirvan para mejorar la imagen del ministro de cara a las elecciones de octubre en detrimento del ministro.

La oposición política de Massa ―JxC, pero también el ultraliberal Javier Milei― percibe este plan para "reforzar el poder de compra del salario" como una estrategia del kirchnerista para arrebatarles votos. En este contexto de crisis, los 175€ que el Gobierno pide para los argentinos con una situación económica difícil podrían significar un desahogo para muchos.

Esto explica que doce de los 23 estados federados ya hayan rechazado participar en el programa. Entre ellos, la ciudad de Buenos Aires, gobernada por Horacio Rodríguez Larreta. También se han pronunciado en contra alcaldes de JxC en municipalidades de otras provincias.

El gobernador de La Plata, Julio Garro, y el de Lanús, Néstor Grindetti, firmaron un comunicado este miércoles en el que mostraban su "preocupación" por el bono de Massa: "Existe una imposibilidad de la gran mayoría de los gobiernos locales de dar cumplimiento a una medida de este tipo sin afectar seriamente sus finanzas en muchos casos; o directamente por carecer de dichos fondos, en otros. Nos encuentra en una situación de suma restricción financiera y falta de disponibilidad de recursos para llevar adelante una medida como la mencionada".

Tal es el peso de los gobiernos locales que la provincia de Buenos Aires, gobernada por el kirchnerista Axel Kicillof, no está siendo capaz de adherirse al plan de financiación de su compañero Massa completamente. La negativa de municipios gobernados por la Unión Cívica Radical (UCR) ha obligado a Kicillof a excluir por el momento del plan a los trabajadores estatales. "Los sueldos de la provincia de Buenos Aires, por los acuerdos que llevamos adelante con los trabajadores y trabajadoras, no han venido perdiendo con la inflación hasta ahora", justificaba el que fuera también ministro de Economía.

Massa se saca una foto con algunos seguidores, el pasado viernes en la ciudad de Rosario.

Massa se saca una foto con algunos seguidores, el pasado viernes en la ciudad de Rosario. Reuters

El favorito para gobernar según las primarias del pasado 13 de agosto, Javier Milei, ha denunciado que se trata de "un nuevo acto de populismo e irracionalidad", y "un nuevo plan platita donde básicamente se trata de torcer una elección inyectándole guita a la gente". Pero Milei advierte: "Eso, tarde o temprano, va a terminar mal. La apuesta que ellos hacen es que esto estalle después de las elecciones con un nuevo salto inflacionario. Espero que la gente siga despertando y se den cuenta de esta nueva trampa populista", apela el líder ultralibertario al votante.