A la izquierda Alberto Fernández y a la derecha la periodista Tamara Petinatto en una fiesta en Casa Rosada.

A la izquierda Alberto Fernández y a la derecha la periodista Tamara Petinatto en una fiesta en Casa Rosada. Efe / E. E.

América

Fiestas ilegales en la Casa Rosada y una denuncia por malos tratos acorralan a Alberto Fernández

En Argentina ha crecido el escándalo cuando han salido a la luz las fotos en las que se ve a su exmujer Fabiola Yañez cubierta de moratones.

10 agosto, 2024 02:40
Buenos Aires

Las fotos que ilustran esta información no son las de una mujer boxeadora inmortalizada después de un combate. Se trata de Fabiola Yañez (43 años) cuando era primera dama de Argentina y era golpeada por su pareja y presidente del país, Alberto Fernández (65 años).

El escándalo en Argentina este viernes era mayúsculo nada más salir a la luz esas fotos y unos chats publicados en varios medios. Lo que ha quedado documentado es que quien fue presidente del país de 2019 a 2023 propinaba puñetazos y arrastraba de los pelos a su mujer, 22 años menor que él, en la residencia presidencial del barrio bonaerense Olivos.

"Venís golpeándome tres días seguidos", se quejaba Yañez en uno de los chats de whatsapp que intercambió con Fernández, filtrados ahora a la prensa. También le increpaba porque "todo el tiempo me golpeas físicamente" y le insultaba: "Estás loco". Los mensajes iban acompañados de sus fotos con un ojo y un brazo amoratados por los golpes recibidos.

Imágenes de Fabiola Yañez tras ser golpeada, presuntamente, por Alberto Fernández.

Imágenes de Fabiola Yañez tras ser golpeada, presuntamente, por Alberto Fernández. E. E.

Lejos de arrepentirse y pedir perdón, el presidente peronista se victimizaba y le pedía a su mujer que cesara con las acusaciones. "Para por favor", rogaba. Y ponía excusas como "me siento mal físicamente" y "me cuesta respirar". Por si no bastara con ello, hacía chantaje emocional a su mujer: "Si denuncias, si contás, me pego un tiro y me mato", según recoge la prensa argentina.

Las compañías de teléfonos obsequiaban al presidente con sus aparatos último modelo, por lo que él le dejó a su hijo pequeño el móvil, tal vez sin advertir el contenido que había quedado grabado en el teléfono. Así fue como Fabiola se hizo con el dispositivo y descubrió las grabaciones que contenía.

Tonteo en el despacho oficial

Una de esas grabaciones fue hecha por el propio Fernández a una periodista, Tamara Petinatto, que lo visitaba en el despacho privado del presidente, en la Casa Rosada, mientras regía la prohibición de reunirse socialmente por la cuarentena dispuesta a raíz de la pandemia de la Covid 19.

Ambos aparecen tonteando en el video mientras la periodista bebe cerveza y confiesa: "Te amo". A lo cual Fernández responde "yo a vos". Ella se muestra escribiendo a mano y revela que se trata de "una carta de amor" dedicada a "Alberto 'Ángel' Fernández" y la firma como "el amor de tu vida". "Nosotros estamos enamorados de otra forma", se jacta la mujer.

Las grabaciones del presidente y de la famosa periodista visiblemente acaramelados en la mismísima Casa Rosada (equivalente al palacio de la Moncloa) remiten casi obligadamente al escándalo sexual del presidente estadounidense Bill Clinton y la becaria Monica Lewinsky en el despacho oval de la Casa Blanca, en 1998.

Protección para Yañez

Ante el crecimiento de este escándalo de violencia machista en la cima del poder, la Justicia ha pedido al Gobierno del presidente Javier Milei que envié más policías a reforzar la custodia de Yañez, experiodista, quien vive ahora 'exiliada' en Madrid, en el barrio de Salamanca, junto a su hijo y su madre, con un guardaespaldas.

El martes pasado Fabiola presentó una denuncia penal contra Fernández. Lo acusó de supuesta "violencia física y mental" durante la convivencia. "Me 'cagaba' a palos", ha señalado en su declaración ante el juez Julián Ercolini.

El magistrado abrió una causa penal contra el expresidente por lesiones en un marco de violencia de género, dictó órdenes de restricción perimetral y de prohibición de salida de Argentina para lo cual, a la vez, le ordenó que entregue su pasaporte en el juzgado. Así, Fernández no podrá acercarse a su exmujer.

Recluido en su piso del barrio de Puerto Madero y abandonado por sus excompañeros políticos, el exmandatario no ha aparecido en público y sólo ha escrito un mensaje en la red social "X" (anteriormente conocida como Twitter). "Quiero expresar que la verdad de los hechos es otra. Sólo voy a decir que es falso y que jamás ocurrió lo que ahora se me imputa", aseguró.

Y adelantó: "No voy a hacer declaraciones mediáticas sino que aportaré ante la Justicia las pruebas y testimonios que dejarán en evidencia lo que realmente ocurrió". Su versión de los hechos, según la prensa, será que Yañez tiene problemas con el alcohol y, en uno de esos trances, se habría caído y golpeado.

El dirigente peronista y socio político de Fernández, Luis D'Elia sugirió directamente al expresidente que se quite la vida. "Si tiene algo de dignidad tiene que encerrarse en su dormitorio, hacerle una carta pidiendo perdón a Fabiola, a sus hijos, a sus compañeros y al pueblo argentino y pegarse un tiro en la cabeza" publicó en "X".

Fernández afronta una posible condena de hasta tres años de prisión. A raíz del escándalo ha perdido su puesto de profesor de Teoría del Delito en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA), donde impartía clases. Y una ONG ha solicitado a la Seguridad Social que anule la pensión vitalicia que cobra como expresidente.