Donald Trump tiene sobrepeso y no hace ejercicio, mientras que Hillary Clinton sufre una “neumonía leve”, hipotiroidismo y alergia al polen. Éste es el estado de salud de los dos principales candidatos a la Casa Blanca, según las últimas informaciones divulgadas por sus respectivas campañas.

Días después de que Clinton, de 68 años, abandonara la ceremonia del 15 aniversario del 11-S en Nueva York a trompicones por una “neumonía”, su equipo ha publicado un nuevo informe elaborado por la médico personal de la candidata donde asegura que “sigue estando sana y en forma para ser la presidenta de Estados Unidos”.

La publicación del documento busca reducir los daños que el episodio infligió a su candidatura, ya que la obligó a paralizar su campaña y otorgó solidez a las reivindicaciones de su rival sobre que la demócrata no goza de la capacidad física necesaria para liderar el país. Asimismo, según expertos estadounidenses consultados por EL ESPAÑOL, el hecho de que ocultara su dolencia no ha ayudado a cambiar la opinión de los numerosos votantes que la ven como una política deshonesta.

En el nuevo informe recogido por la prensa estadounidense, la médico personal de Clinton, Lisa Bardack, afirma que su paciente “continúa recuperándose” y otorga más detalles sobre lo sucedido el fin de semana, pero no aporta mucha más información sobre la salud e historia clínica de la aspirante que el que redactó hace un año.

Trump, sin embargo, no cree que su rival pueda resistir la presión de ser presidenta y este miércoles lanzó un severo ataque a la demócrata. “En esta hermosa sala a 122 grados [farenheit, 50 centígrados] hace calor y siempre hace calor en mis actos porque la audiencia es enorme. Las salas no fueron diseñadas para este tipo de multitud. No sé, amigos. ¿Creéis que Hillary Clinton sería capaz de estar de pie aquí y hacer esto durante una hora? Yo no lo sé”, aseveró en un mitin en Ohio.

El magnate ha dado nuevos detalles sobre su salud en un programa del The Dr. Oz Show que se emitirá este jueves. CNN entrevistó a miembros de la audiencia que asistieron a la grabación del programa y adelantó algunos detalles del estado del candidato. El magnate pesa más de 100 kilos, toma medicación contra el colesterol y consume comida rápida, según la cadena norteamericana.

El único documento disponible hasta el momento sobre la salud de Trump era una escueta carta redactada por su médico en diciembre de 2015 donde aseveraba que Trump sería el presidente más sano en la historia de EEUU y proclamaba -queriendo decir que todo eran buenas noticias- que todos los test del multimillonario daban resultados positivos.

Trump ha ocupado el estrado nacional durante tres días mientras su rival se recuperaba, pero su Clinton regresa al ruedo este jueves y visitará Greensboro, en el sureño Carolina del Norte, para luego acudir a una cena organizada por el Instituto del Caucus Hispano del Congreso en la capital del país, informa Efe.

El retorno de Clinton se produce en un momento en que las encuestas sugieren una remontada del magnate y apuntan hacia una carrera más ajustada. Un sondeo a escala nacional divulgado por The New York Times este jueves muestra a Trump y Clinton empatados con un 42% de intención de voto al tener en cuenta el impacto de candidatos alternativos fuera de los grandes partidos políticas en las elecciones.

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