Travis Kalanick, cofundador y consejero delegado de Uber, va a abandonar su puesto en un grupo de empresarios que asesoran al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, después de las críticas recibidas en relación con la orden sobre inmigración de la Casa Blanca, informó The New York Times.
El periódico neoyorquino tuvo acceso a un correo electrónico enviado por Kalanick a los empleados de la empresa para informar de su decisión y en el que volvió a mostrar su oposición al veto a la entrada en Estados Unidos a ciudadanos de varios países.
Uber se ha visto envuelta en la polémica en los últimos días como consecuencia de la orden ejecutiva de Trump, primero cuando algunos usuarios consideraron que trató de aprovecharse de una huelga de taxistas contra la medida y luego por la relación de su máximo responsable con el presidente estadounidense.
Críticas y boicot
Kalanick ha dejado claro en todo momento que se opone a la medida migratoria, pero aún así el popular servicio de transporte ha sido objeto de una amplia campaña de boicot.
Entre otras cosas, los críticos lamentaban que el responsable de Uber continuase asesorando a Trump a pesar de que muchos conductores que trabajan para su empresa están entre los afectados por el veto.
En su mensaje, Kalanick dijo ha hablado con el presidente para trasladarle los problemas de su medida y para comunicarle que va a dejar el grupo asesor. "Sumarme al grupo no suponía ser un apoyo del presidente o de su agenda, pero desafortunadamente ha sido malinterpretado", dijo.
La organización Make the Road New York, que defiende a inmigrantes en la ciudad, celebró la decisión de Kalanick y consideró que supone "una increíble victoria simbólica" para los inmigrantes, los musulmanes y todos aquellos que se oponen a la "agenda de odio" de Trump.