Kamala Harris y el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, en el Reading Terminal Market en Filadelfia.

Kamala Harris y el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, en el Reading Terminal Market en Filadelfia. Reuters

EEUU

Kamala busca el equilibro en la vicepresidencia: apelar a los moderados sin alejar a la izquierda

La recién confirmada candidata demócrata a la presidencia de EEUU se entrevistó el domingo con los tres finalistas, todos ellos hombres y con perfiles moderados que reciben críticas de los colectivos progresistas.

6 agosto, 2024 02:00

Apelar al votante moderado, rural y de los estados bisagra del Medio Oeste de Estados Unidos sin alejar a los colectivos más progresistas. Ese es el complejo equilibrio que debe buscar Kamala Harris al elegir a su compañero de candidatura y aspirante a Vicepresidente. Hay tres finalistas y un favorito, Josh Shapiro, quien en las últimas horas ha sido blanco de críticas de sindicatos y otros grupos de presión.

Saphiro, gobernador de Pensilvania, podría ser nombrado compañero de candidatura este mismo martes en un mitin convocado en Pensilvania, la ciudad más poblada del estado. Sin embargo, el gobernador de Minnesota, Tim Walz, y el senador por Arizona, Mark Kelly, también han cobrado fuerza en las últimas horas.

Esos serían los tres finalistas de acuerdo con las filtraciones de la prensa estadounidense. Aunque el silencio de la campaña de Harris acrecienta las especulaciones y otros apuestan aún por Andy Beshear, gobernador demócrata en un estado eminentemente conservador como Kentucky, y Pete Buttigieg, actual secretario de Transportes y voz liberal dentro del Partido Demócrata.

El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, durante un mitin en Pensilvania.

El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, durante un mitin en Pensilvania. Reuters

Harris se entrevistó en la tarde del sábado con los aspirantes a la nominación. Según la CNN, fueron conversaciones de algo más de una hora de duración para determinar tres puntos en los que se está fijando el equipo de la actual Vicepresidenta, "competencia, química y valores".

Pero la realidad es que la selección de los compañeros de "ticket" presidencial suele hacerse según criterios electorales. La vicepresidencia en EEUU es una cartera que carece de competencias concretas, más allá de ciertas delegaciones que haya el presidente o de sustituir al Jefe de Estado en situaciones excepcionales. Por ello, los estrategas de campaña buscan a los perfiles que puedan arañas más votos o suplir las carencias del candidato principal.

En este caso, la selección de un hombre blanco, en un país donde las cuestiones identitarias marcan tanto la vida política, es obvia. Harris, mujer negra de California y con 59 años, ya es capaz por sí sola de atraer al voto femenino, joven, urbano y de la comunidad negra. Su compañero, debe movilizar a los hombres, a los moderados y los votantes de regiones industriales o rurales.

Se espera que el anuncio del elegido se produzca en las horas anteriores a un mitin en Filadelfia, donde la nueva candidatura demócrata tras la agónica retirada de Joe Biden, arrancará una gira por los estados más disputados.

Sin embargo, tras la euforia por el nombramiento de Harris el partido ha entrado en una fase "amarga", indica el New York Times, con una feroz competencia interna entre las distintas corrientes del partido por impulsar a sus aspirantes favoritos.

Josh Shapiro, elección clara

El actual gobernador de Pensilvania, Josh Saphiro, ocupa el primer puesto en las quinielas por un motivo contundente: no hay escenario para la victoria demócrata que no incluya el triunfo en Pensilvania, uno de los estados que más delegados reparte para el Colegio Colectoral (19) y en el que a diferencia de California o Texas, cuyo resultado se conoce de antemano, los márgenes entre republicanos y demócratas son mínimos.

En 2020, tras un recuento agónico, Biden consolidó su camino hacia a la Casa Blanca tras confirmar su victoria en ese estado por menos de 100.000 votos respecto a Donald Trump.

Saphiro, de 51 años, es el favorito en las apuestas desde el primer momento. Y el hecho de que la campaña arranque con un mitin en Filadelfia no ha hecho más que avivar los rumores sobre su selección.

Gobierna Pensilvania desde 2023 con el 56% de los sufragios y antes ejerció como fiscal general de ese mismo estado, un cargo que Harris desempeñó en California antes de lanzarse a la política como senadora y por el que ambos ya habían mantenido contacto. Entre sus puntos fuertes destacan su carisma, su efectividad en medios de comunicación y sus propuestas legislativas moderadas.

Sin embargo, en las últimas horas se han sucedido críticas por el apoyo de Saphiro, quien es judío practicante, a Israel. Fue muy crítico con la gestión que las universidades de la Ivy League, entre ellas de la Pensilvania, hicieron de las protestas a favor de Palestina en los campus aunque también se ha mostrado opuesto a las políticas del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.

En plena batalla interna, el diario Philadelphia Inquirer, rescató este fin semana un artículo que Saphiro publicó en 1993 en el que dijo que la paz "nunca llegará" a Oriente Medio ya que los palestinos tenían una "mentalidad demasiado enfocada en la batalla". Al ser interrogado por esa opinión de hace 30 años, cuando era estudiante universitario, dijo: "Tenía 20 años y tengo esperanzas de que podremos ver un día en que la paz reine en Oriente Medio".

Mark Kelly, astronauta y exmilitar

Mark Kelly no proviene del Medio Oeste estadounidense, donde parece jugarse el partido en estos comicios, pero su trayectoria personal lo sitúa como una elección acertada.

Actualmente es senador por Arizona, un estado fronterizo con México donde la demografía ha cambiado radicalmente en la última década y que debe equilibrar la gestión de la inmigración con el apoyo a la creciente comunidad hispana. En 2020, Biden ganó allí por un margen de 10.000 votos.

Kelly llegó a Washington DC en 2020 tras obtener un escaño como senador por Arizona. Antes, la política había sido un asunto de su mujer Gabby Giffords, quien sobrevivió a un disparo en la cabeza en 2011, cuando ejercía en la Cámara de Representantes, y cuyas secuelas la obligaron a retirarse.

Desde entonces, la pareja defienden con firmeza endurecer los controles a la posesión de armas en Estados Unidos, un asunto que moviliza a los votantes moderados y demócratas.

Antes de dedicarse a los asuntos públicos, Kelly, de 60 años, fue piloto de combate de la Marina y astronauta de la NASA, llegando a pasar más de 50 días en el espacio en múltiples misiones.

Mark Kelly reunido con un grupo de soldados.

Mark Kelly reunido con un grupo de soldados. Twitter

Da voz al ala moderada dentro del partido. Pero no cuenta con el respaldo de algunos grupos sindicales como United Auto Workers, con más de 350.000 afiliados, y cuyo líder apunta la oposición de Kelly a un proyecto de ley que impulsaría la afiliación a sindicatos, muy baja en EEUU en comparación con el continente europeo.

También juega en su contra que debe perder su asiento en el Senado, donde los demócratas cuentan con una mayoría por la mínima. De resultar elegido, su escaño debería votarse al año siguiente en una elección especial sin garantías de victoria para su partido.

Tim Waltz, la sorpresa

Tim Waltz no parece una elección sencilla ni obvia, pero sí posible. A sus 60 años, es gobernador del estado de Minnesota desde 2019 y antes fue miembro de la Cámara de Representantes en Washington DC durante más de una década, resultando reelegido en cinco ocasiones.

E estado de Minnesota, aunque situado en el Medio Oeste, no es un territorio decisivo porque su población ha ido virando hacia posiciones más progresistas en los últimos comicios. Trump perdió allí en 2016 y 2020. Tampoco se espera que la dinámica cambie y gane en este 2024. En cambio Waltz si que podría impulsar el voto en otros estados cercanos como Michigan, Wisconsin y Pensilvania.

Popular y telegénico, el político ha impulsado en los últimos días un mantra asumido ya por la campaña de Harris: responder que Trump y J.D. Vance son "demasiado extraños" a cada declaración polémica que hagan, sin tomarles muy en serio.

Es el más progresista de todos los favoritos y, entre sus puntos flojos figuran los reproches que recibió por su gestión en la pandemia de coronavirus y su reacción tardía para detener los disturbios durante las protestas del 'Black Lives Matter' de 2020.

Beshear, cristiano y progresista

Ha perdido fuelle pero no debe pasarse por alto el atractivo de Andy Beshear: Gobierna desde las filas demócratas un estado rural y conservador como Kentucky, que Trump se llevó por más de 20 puntos de ventaja en 2020.

A sus 46 años hace también gala de su fe en la religión cristiana, un grupo religioso tendente a posiciones políticas conservadores y cada vez mas alineado por Trump.
Mantiene, además, un enfrentamiento público con J.D. Vance, el aspirante a la vicepresidencia elegido por Trump, quien también nació en Kentucky pero se crió en Ohio y ganó fama al describir la vida rural estadounidense en su novela Hillbilly Elegy.
"Es un tipo que solía venir un par de semanas al verano, en el mejor de los casos, a Kentucky y luego escribió un libro que decía conocernos. Llamó a mi gente perezosa, a los mineros de carbón que construyeron este país", dijo en la prensa local.

Beshear, rural de tendencia progresista, y Vance, rural ultraconservador, protagonizarían un rifirrafe duro durante los meses restantes de campaña, pero Kentucky no es un estado en juego.

Harris, por su parte, afronta esta decisión y anuncio inminente con el viento de cara: el último sondeo de la encuestadora YouGov para la cadena CBS sitúa a la candidata con el 50% de intención de voto frente al 49 % de Trump. Desde que recibió el testigo de Biden, la movilización entre los demócratas ha subido 4 puntos y ha caído dos entre los republicanos. Es decir, hay partido.