Última noche de la Convención Nacional Demócrata: Kamala Harris se dirige al pueblo

En vez de la guerrera alegre que hemos visto y escuchado en las últimas semanas, Harris dio un discurso sobrio y se presentó como una candidata "realista, práctica y con sentido común". Con ese mensaje, la demócrata buscaba llegar a los independientes, republicanos y a los indecisos.

También mantuvo el discurso breve. Duró unos 35 minutos. Eso pudo haber ayudado a captar a estos votantes de la costa este en el horario de máxima audiencia televisiva antes de que se fueran a dormir. En el este el discurso comenzó a las 22:30, una hora tardía para los estadounidenses.

1. Harris no se vistió de blanco sufragista; en cambio, llevó un traje oscuro, un contraste con las muchas mujeres que vestían de blanco en la Convención Demócrata, un símbolo del movimiento sufragista que luchó por el derecho al voto de las mujeres.

En su campaña presidencial de 2016, Hillary Clinton se apoyó en la importancia histórica de ser la primera candidata presidencial de un gran partido político. En cambio, Harris ha encarnado su estatus como mujer negra y surasiática, pero no ha hablado mucho de ello. Ha dejado que otros, notablemente la propia Clinton, destaquen este aspecto.

Además, salvo el traje color canela de Chloé que usó durante su aparición sorpresa en la convención el lunes, sus elecciones de vestuario no han recibido tanta crítica reservada para las mujeres políticas. Pero aún quedan más de dos meses, así que hay que darle tiempo.

2. "Nunca dejes que nadie te diga quién eres. Muéstrales quién eres". Aquellos que hemos seguido a Harris de cerca conocemos bien su historia a estas alturas, pero las personas a las que necesitaba llegar anoche son los independientes y los indecisos que no prestan mucha atención a la política. Este discurso iba claramente dirigido a ellos, y necesitaban escuchar su historia.

Esto no es algo que le salga de forma natural: en su candidatura para fiscal del distrito de San Francisco y año más tarde como fiscal general de California, podía mantenerse en su zona de confort y centrarse en su trabajo, pero los estadounidenses quieren conocer personalmente a sus candidatos presidenciales.

Kamala Harris este jueves durante su discurso en la Convención Demócrata. Efe

Para su fortuna, como hija de dos inmigrantes, una mandre de la India y un padre jamaicano, Harris tiene una gran historia que contar. También fue criada en gran parte por su madre en la clase media de Oakland, California.

3. Harris brilló aún más cuando empezó a criticar a Trump. Culpó directamente al republicano por la revocación de Roe vs Wade (decisión de la Corte Suprema que protegía el acceso de las mujeres al aborto) y dijo que los republicanos que apoyan las prohibiciones del aborto están "fuera de sí".

También aseguró que no se acercrá "a tiranos y terroristas, como Kim Jong-un, que están apoyando a Trump". También arremetió contra el republicano por intentar revertir los resultados de las elecciones de 2020 y por su participación en la insurrección del 6 de enero contra el Capitolio. "Donald Trump trató de tirar vuestros votos a la basura", remarcó. 

4. Aunque no fue muy concreta en relación a sus políticas, sí abordó sus dos temas más complicados: la frontera y la crisis en Gaza. Harris trazó una línea sobre la política fronteriza, citando el proyecto de ley que consensuaron demócratas y republicanos que Trump se negó a firmar. Harris prometió firmarlo como presidenta.

Además, recibió uno de los aplausos más fuertes de la noche cuando pidió "seguridad y dignidad" para el pueblo de Gaza. "Ahora es el momento de llegar a un acuerdo sobre los rehenes y lograr un alto el fuego", afirmó antes de remarcar el derecho de Israel a la autodefensa. Es un acto de equilibrio difícil, pero uno que no está evitando.

Kamala Harris tras su discurso este jueves en Chicago. Efe

5. ¿Han recuperado los demócratas finalmente la libertad y el patriotismo de los republicanos? Parece que sí. Harris subió al escenario con la canción Freedom,de Beyoncé, que se ha convertido en un tema que entrelaza sus políticas, como los derechos reproductivos y los derechos de voto.

Mientras estaba en el atril contemplando la ovación, la multitud coreaba "¡USA!". Harris, que agradeció la ovación reiteradamente, finalmente, para poder iniciar su discurso, los silenció diciendo "pongámonos manos a la obra" con una gran sonrisa.

6. Los demócratas son cautelosamente optimistas y se muestran desconfiados con las encuestas. Tanto Hillary como Bill Clinton advirtieron a los demócratas que, aunque los sondeos parezcan favorables, no deben confiarse.

Desde que los demócratas se unieron en torno a Harris como candidata hace apenas tres semanas, las encuestas han cambiado a su favor, y se puede anticipar el típico impulso que da la Convención.

Sin embargo, la verdadera prueba será cuando la novedad se desvanezca en septiembre y podamos ver si estos números realmente tienen consistencia. Harris haría bien en seguir presentándose como la infravalorada en esta campaña, ya que los activistas del partido responden bien a una generosa dosis de esperanza y alegría, junto con la tensión de tener algo por lo que luchar.