'Paseo de los Ángeles: 14 de julio', así se llama la asociación de víctimas del atentado del pasado 14 de julio anunciada esta misma semana. Su objetivo es conseguir que “todas las preguntas sobre este atentado se puedan hacer con toda transparencia”, explicó el colectivo a través de la Federación Nacional de Víctimas de Atentados y Accidentes Colectivos (Fenvac) a la Agencia France Presse. “Esta exigencia por la verdad se debe en memoria de todos los que nos han dejado y todos aquellos cuya vida ya nunca será la misma. Se trata igualmente de la seguridad de todos, en Niza y en toda Francia”, añadió el comunicado sobre su creación.
Fenvac ha señalado que una reciente reforma legislativa permitirá que la asociación pueda presentarse como parte civil en la investigación judicial: “Es esencial que las víctimas y sus familias sean actrices plenas de los derivados del atentado del 14 de julio”. La polémica ha sido grande en Francia tras diversas denuncias de fallos de seguridad en el dispositivo de la fiesta aquel día en Niza, como por ejemplo que el terrorista pudo acceder fácilmente a la zona habilitada para los peatones con el simple argumento de que llevaba helados para la fiesta en su camión frigorífico de 19 toneladas que resultó ser un arma letal sin cargamento alguna más que armas falsas -a parte de la pistola que empuñó- y munición.
Aquel día fallecieron 84 personas, incluidos muchos niños y personas mayores. Pero la semana pasada perdió la vida la última víctima.
El último ángel
Pierre era psicólogo y tenía 56 años y permanecía hospitalizado por sus heridas. Dio su último suspiro el 4 de agosto en el hospital de Niza. Su esposa Françoise y su hijo Elouan de 13 años habían fallecido sobre el paseo de los Ingleses donde el terrorista arrolló a la multitud tras los fuegos artificiales de la fiesta nacional francesa, explicaron los medios locales.
Por desgracia, la terrible historia de estos tres “ángeles” no acaba aquí, pues también tenía una hija de 14 años que sobrevivió. Ella seguía ingresada y “en vías de recuperación”, informó el diario Le Parisien tras fallecer su padre. Otras tres personas se debatían entre la vida y la muerte en el hospital Pasteur de Niza la semana pasada.
Uno de cada tres ángeles, musulmanes
Otro ángel de la asociación de víctimas es el pequeño Yanis de 4 años, que acudió con sus padres y unos vecinos a ver los fuegos artificiales. Volvía de tomar un helado cuando el camión le arrolló. A su madre le consolaba saber que les dejó mientras llevaba una cadenita con una sura protectora del Corán, regalo de nacimiento que había hecho su abuela al pequeño. Aquel día murieron 30 musulmanes, según datos municipales confirmados al diario Le Figaro de acuerdo con los ritos funerarios que solicitaron sus seres queridos.
Los musulmanes, al igual que los cristianos, también creen en los ángeles. Según explica el portal IslamReligion.com es uno de los sies pilares de su fe. De hecho, fueron ángeles (o un ángel) quienes anunciaron el nacimiento de Jesús a la virgen María, según ambas religiones (Corán, 3:45-47; Biblia, evangelios). El islam considera a Jesús un profeta, mientras que los cristianos creen que es el hijo de Dios.
El ángel abuelo
82 años tenía François, el mayor de todas las víctimas del terrorista de Niza. El 14 de julio salió al paseo marítimo de Niza a disfrutar de la fiesta nacional con toda su familia: su mujer, su hija, su yerno, su nieto y sus consuegros. Fallecieron todos excepto el consuegro. Seis miembros de una misma familia cuyo único error fue el de todos: pensar que era una agradable noche en la que podían disfrutar de una velada bonita con fuegos artificiales junto al resto de visitantes y nizardos.
El instalador de calefacción retirado falleció junto a su esposa, Christiane, su hija Verónique, su nieto Michaël (hijo de Véronique) y sus consuegros Gisèle y Germain. “Era una familia querida, conocida, implicada en la vida comunitaria”, declaró Gérard Didelot, alcalde de Herserange, una localidad cercana a la frontera con Bélgica y Luxemburgo, donde vivían todos excepto los consuegros de François. Christoph es quien de golpe perdió a sus seres más queridos y representa -junto a la hija de Pierre, cuyo nombre preservamos por ser menor de edad- a esas otras víctimas, las que se quedan aquí y luchan por salir adelante.
Pierre (56, Francia), Françoise (55, Francia), Elouan (13, Francia), Yanis (4, Francia), François (82), Christiane (78, Francia), Maria Grazia (79, Italia), Silan (19, Alemania), Mykhalo (22, Ucrania), Myriam (29, Francia), Olfa (31, Túnez), Matthias (Francia), Alina (27, Rusia), David (44, Francia), Aldija (42, Argelia), Laura (13, Francia), Adib (51, Francia), Linda (54, Suiza), Jocelyne (Francia), Mario (90, Italia), Céline (46, Francia), Fatima (62, Marruecos), Odile (Francia), Hervé (43, Francia), Igor (47, Rusia), Marzena (20, Polonia), Cristinel (34, Rumanía), Sean (51, EEUU), Brodie (11, EEUU), Lionel (70, Francia), Magdalena (21, Polonia), Roman (56, Georgia), Kayla (6, Suiza), Elizabeth (Brasil), Angelo (71, Italia), Ludivine (25, Francia), Carla (48, Italia), Rachel (39, Francia), Christiane (67, Francia), Narine (34, Armenia), Rickard (20, Estonia), Emmanuel (48, Francia), Mehdi (12, Francia), Bilel (25,Túnez), Nicolas (20, EEUU), Germain (68, Francia), Yvette (63, Francia), Véronique (55, Francia), Tatiana (61, Francia), Yanis (8, Francia), Raymonde (77, Francia), Hugues (49, Francia), Léa (68, Francia), Thérèse (72, Francia), Fatima (43, Francia), Lyubov (59, Kazajistán), Marina (33, Kazajistán), Camille (Francia), Gianna (68, Italia), Sylvie (79, Italia), Natalia (Rusia), Silvia (2, Francia), Michaël (28, Francia), André (17, Francia), Ludovic (15, Francia), Zahia (70, Argelia), Laurence (46, Francia), Mino (31, Madagascar), Laurence (49, Francia), Léana (2, Argelia), Victoria (20, Rusia), Saskia (29, Alemania), Mohamed (Túnez), Amie (12, Francia), Bruno (42, Francia), Jacqueline (64, Francia), Kylian (4, Túnez), Salma (18, Alemania), Rémédios (25, Francia), Joseph (7, Francia), Patricia, Marie-Pierre, Romain, Stéphanie (43).
Descansen en paz.