“Las mujeres deben ganar menos que los hombres porque son más débiles, más pequeñas, menos inteligentes y por eso tienen que ganar menos”. Así se dirigió el eurodiputado polaco Janusz Korwin-Mikke, de 74 años, a la española Iratxe García el miércoles durante un debate en el Parlamento Europeo sobre la brecha salarial.
“Señor diputado, según usted, según sus teorías, yo no tendría derecho de estar aquí como eurodiputada”, le respondió la parlamentaria socialista. “Sé que le duele y le preocupa que hoy las mujeres podamos estar representando a los ciudadanos en igualdad de condiciones como usted. Yo aquí vengo a defender a las mujeres europeas de hombres como usted”.
Las palabras de Korwin-Mikke, no adscrito a ningún grupo en la Eurocámara y detractor de la UE, han llevado al presidente del organismo, Antonio Tajani, a iniciar una investigación contra el septuagenario, que podría culminar en una multa y suspensión temporal. No sería la primera vez que el Parlamento comunitario sanciona a Korwin-Mikke, que defiende que el edificio de la Comisión Europea en Bruselas sea usado como un prostíbulo.
En 2015, el polémico eurodiputado fue suspendido durante diez días y multado con 3.000 euros. En una ocasión hizo el saludo nazi en la Eurocámara para protestar contra una iniciativa de crear un billete europeo de transporte. “No apoyáis la diversidad, apoyáis la unificación. Esta vez es un reich, un pueblo, un ticket”, afirmó extendiendo el brazo derecho. En otra ocasión se refirió a los refugiados “basura”.
Tampoco era la primera vez que Korwin-Mikke se metía en relación con el nazismo. El político ha sugerido que Adolf Hilter desconocía que se estuviera produciendo el Holocausto y, que de ser juzgado hoy, sería absuelto.
“Matar a millones de personas no era el objetivo de Hitler. Muéstreme una sola frase que pruebe que sabía acerca del exterminio de judíos”, dijo en una entrevista a una revista polaca recogida por el Times of Israel. “De tener que ser juzgado hoy, sería exonerado. Hitler merecería ser colgado, pero no por esto”.
Libertario en lo económico -se comió su declaración de la renta para protestar contra los impuestos- y absolutista en lo político, fue miembro del Parlamento polaco entre 1991 y 1992. Entre 2011 y 2015 capitanearía el ultraderechista Congreso de la Nueva Derecha, pero terminó destronado por tener dos hijos fuera del matrimonio. “Muchos de nosotros somos viejos conservadores, por lo que nos quedamos sorprendidos y asqueados”, aseguró su sucesor acerca del escándalo, según recoge Radio Poland.
Ahora presidente del partido euroescéptico KORWiN, Korwin-Mikke se ha granjeado buena parte de su fama gracias a sus comentarios despectivos hacia las mujeres, como los que pronunció esta semana en Bruselas. En una entrevista con el británico Observer hace en 2014, argumentó que el semen de un hombre puede determinar la forma de pensar de las mujeres con las que se acuesta.
“Existe la hipótesis de que las actitudes del hombre pasan a la mujer cuando el semen penetra el tejido”, aseguró el legislador, que defiende que un “30 o 40%” de las mujeres mienten cuando dicen no querer mantener relaciones sexuales con un hombre. De hecho, las citas de Korwin-Mikke son tan notorias que hay una página de Facebook dedicada a ellas.
A la líder del Frente Nacional francés, Marine Le Pen, el eurodiputado polaco le pareció demasiado radical para formar una alianza con él en la Eurocámara. No le pareció así al padrino del brexit Nigel Farage, que en 2014 logró un acuerdo para que un eurodiputado del partido de Korwin-Mikke se sumara a su grupo parlamentario para no perder acceso a fondos europeos.
“Los federalistas de la UE se sentarán en una esquina temblando y murmurando 'por favor haced que se vayan los euroescépticos' una y otra vez”, celebró el británico.