El Tribunal Superior de Londres ha bloqueado la demanda interpuesta por el ex jefe del gabinete del ejército iraquí, el general Abdul Wahed Shannan Al Rabbat, contra Tony Blair. Al Rabbat acusa a Blair de acometer un "crimen de agresión" por la invasión de Irak en 2003 mientras era primer ministro.
El general iraquí también responsabiliza a los entonces Secretario de Relaciones Exteriores, Jack Straw, y el Procurador General, el Lord Goldsmith. Ambos desempeñaron un papel fundamental durante el mandato de Tony Blair, según The Telegraph.
Los abogados de Al Rabbat solicitaron al Tribunal Superior londinense el permiso para solicitar una revisión judicial en un intento de conseguir que la Corte Suprema, la máxima institución judicial de la isla, revocara una decisión de la Cámara de los Lores de 2006, en la que dictamina que no existe tal crimen de agresión bajo la ley de Inglaterra y Gales.
A través de un escrito, el tribunal ha considerado que "debido a una decisión de la Cámara de los Lores vinculante en este tribunal, no hay crimen de agresión en virtud de la legislación interna del Reino Unido."
Inmunidad ante la ley
La Corte de Magistrados de Westminster, por su lado, se negó a emitir citaciones en noviembre del año pasado, alegando que los exministros tenían inmunidad ante la ley y que, en cualquier caso, el actual Procurador General, Jeremy Wright, tendría que dar su consentimiento.
Del mismo modo, el Fiscal General del Reino Unido ya se posicionó al respecto e insistió a Al Rabbat que el enjuciamiento a Blair era "imposible" e indiscutible porque el crimen de agresión no está reconocido en la legislación inglesa.
Es entonces cuando el general iraquí ha decidido acudir ante el Tribunal Superior de Londres. Actualmente él vive en Muscat, Omán, no posee un pasaporte y no puede viajar a Gran Bretaña.
Reino Unido formó parte de la coalición encabezada por Estados Unidos, y de la que España formaba parte, que entraron en guerra contra Irak después de que el presidente estadounidense, George W. Bush, y Blair, acusaran al entonces presidente iraquí, Saddam Hussein, de poseer armas de destrucción masiva y tener vínculos con terroristas.