La canciller alemana, Angela Merkel, ha lamentado el fracaso de las conversaciones de su bloque conservador con liberales y verdes para formar una coalición de gobierno que, a su juicio, habría sido posible, y se comprometió a seguir actuando con "responsabilidad".
El lunes "contactaré con el presidente (Frank-Walter Steinmeier), le informaré del estado de la situación y veremos cómo se desarrollan las cosas", manifestó Merkel a los periodistas ante la incertidumbre que se abre en el país casi dos meses después de las elecciones.
"Asumiremos la responsabilidad por nuestro país también en horas difíciles y seguiremos negociando con mucha responsabilidad porque la gente en Alemania mayoritariamente deseaba hoy que nos encontráramos", manifestó.
Fueron los liberales quienes dieron por concluidas poco antes de la medianoche las negociaciones, atascadas en asuntos como la política de inmigración o la protección del medioambiente.
En un "día histórico" y tras casi cinco semanas de negociaciones, es el momento de reflexionar, señaló Merkel antes de asegurar que, como canciller en funciones, hará todo lo que esté en su mano para que el país siga bien dirigido en las próximas semanas.
Según apuntó, el bloque conservador de la Unión Cristianodemócrata (CDU) que ella dirige y su ala bávara de la Unión Socialcristiana intentaron todo para que las conversaciones llegaran a buen puerto.
"Podríamos haber alcanzado un acuerdo", afirmó la canciller, quien estimó que se había avanzado mucho en las conversaciones para la estabilidad del país, para el crecimiento económico y también en cuestiones más controvertidas como la política medioambiental, bandera de los verdes.
Lamentó así el abandono de las conversaciones por parte del Partido Liberal (FDP) y se mostró convencida que las grandes diferencias en materia de inmigración con los verdes se podrían haber resuelto con un acuerdo.