Al menos seis personas han muerto, entre ellas dos niños, y decenas han resultado heridas a causa del temporal de viento y lluvia que azotó la noche del miércoles la península de Calcídica, en el norte de Grecia.
El nuevo ministro de Protección Ciudadana, Mijalis Jrisojoidis, informó de que los fallecidos son todos turistas, dos de nacionalidad rusa, dos checos y dos rumanos.
Los rusos, un hombre de 39 años y su hijo de dos, fueron alcanzados por la caída de un árbol en la localidad de Nea Potidea. Dos rumanos, una mujer de 54 años y un niño de ocho, murieron al desplomarse el techo de una taberna en Nea Playía, donde varias personas resultaron heridas.
El temporal causó también la muerte de un matrimonio de checos cuando un golpe de viento volcó la caravana en la que estaban. En el vehículo se encontraban además el hijo y nieto de la pareja, que lograron salvarse. Las autoridades de salvamento también buscan a un pescador, de 62 años, que ha sido dado por desaparecido.
El temporal que ha afectado el centro, oeste y norte de Grecia ha causado grandes destrozos sobre todo por árboles arrancados de raíz y automóviles volcados, pero también en edificios, donde salieron volando tejas o cayeron barandillas de terrazas.
Los medios locales mostraban esta mañana imágenes de playas con tumbonas y sombrillas destrozadas, carreteras cortadas por árboles caídos o automóviles y motocicletas volcados. Una instantánea de lo fue este breve pero intenso temporal, con vientos que llegaron a alcanzar la intensidad de un huracán.
"Es la primera vez en mis 25 años de profesión que he vivido algo semejante", dijo a la televisión pública Athansios Kaltsas, director del Centro Médico de Nea Mudaniá, donde muchos de los heridos fueron tratados por fracturas. "Fue todo tan abrupto, y tan repentino", añadió.
Kaltsas informó de que más de medio centenar de personas, con edades entre los ocho meses y 70 años, tuvieron que ser atendidas por algún tipo de lesión, la mayoría heridas en la cabeza o fracturas diversas a causa del impacto de ramas de árboles u otros objetos que volaron por los aires.
El cuerpo de bomberos recibió más de 600 llamadas durante toda la noche en la zona afectada. En dos de los tres "dedos" que conforman la península de Calcídica, en la que también se encuentra el monte sagrado de Atos, hubo cortes de electricidad a causa de la caída de postes.