Austria, uno de los países europeos que mejor había salido en la primavera pasada de la primera ola de la pandemia del coronavirus, se vio obligada este sábado a anunciar un estricto confinamiento ante la incesante subida de los contagios.
Las nuevas medidas, comunicadas por el gobierno conservador ecologista en Viena, entrarán en vigor el próximo martes y regirán hasta el 6 de diciembre próximo inclusive.
El objetivo, según dijo el canciller federal, el conservador Sebastian Kurz, en una rueda de prensa es lograr una "reducción sustancial" de los contagios, descongestionar los hospitales y salvar las fiestas navideñas para las familias y para el comercio.
El pasado 3 de noviembre el gobierno había anunciado un confinamiento más ligero, con el cierre de restaurantes, bares, teatros, salas de conciertos, y también de universidades y colegios para alumnos a partir de los 15 años.
Sin embargo, incluyendo un toque de queda nocturno, estas medidas no dieron los resultados esperados y las infecciones siguieron subiendo hasta un nuevo máximo de unos 9.600 casos ayer, viernes, con más de 4.000 personas hospitalizadas, entre ellas, unos 560 en cuidados intensivos.
El promedio de la semana pasada fue de unos 7.000 contagios diarios, con una incidencia de 550 casos por cada 100.000 habitantes, o sea, 11 veces superior que valor deseado, mientras que un 77 % de las infecciones ya no se pueden rastrear. El número de fallecidos por Covid-19 supera los 1.600, el doble que hace dos meses.
Cierre de colegios
Ante esta situación, el país alpino necesita ampliar el vigente toque de queda nocturno -con numerosas excepciones- a todo el día, lo que implica que todas las instituciones educativas, desde guarderías hasta universidades, deberán permanecer cerradas y funcionar de forma telemática siempre que sea posible.
Aquellos empleados que no puedan teletrabajar podrán enviar sus hijos a las escuelas y guarderías para que cuiden a los niños allí.
Por otra parte, todos los comercios y servicios no esenciales, incluyendo peluquerías, deberán permanecer cerrados durante las próximas tres semanas, con excepción de supermercados, droguerías, farmacias, bancos y correos.
"Si no reaccionamos de forma masiva, existe el riesgo de que los contagios sigan subiendo o permanezcan a un nivel demasiado alto", dijo Kurz al anunciar el nuevo confinamiento. "Nuestro objetivo es volver a abrir el comercio y los colegios a partir del 7 de diciembre", resumió el canciller federal.
Reducción de contagios
Las medidas anunciadas hoy incluyen un llamamiento explícito del gobierno a todas las empresas y a todos los empleados a trabajar, siempre que sea posible, de forma telemática.
Además, los contactos sociales deben limitarse al máximo a partir del martes próximo a las personas que convienen un mismo hogar y a personas importantes de referencia fuera del hogar, aunque siempre solo una por encuentro.
"Les ruego no se encuentren con nadie fuera de su familia. Cada contacto personal es uno demasiado. Solo así podemos evitar que el sistema de salud se vea superado", dijo Kurz.
"Si bien nadie desea un segundo confinamiento, sabemos que un confinamiento es la única medida que funciona", destacó el canciller y recordó que países como Israel lograron reducir sustancialmente los contagios con un confinamiento.
Ayudas a empresas
Para las empresas afectadas por este segundo confinamiento el Estado desembolsará generosas ayudas financieras, siguiendo el ejemplo de la asistencia para el sector gastronómico cerrado desde el pasado 3 de noviembre. Estas transferencias compensan a las empresas con hasta un máximo 80% de su facturación registrada en noviembre del año pasado.
Si bien el deporte individual al aire libre estará permitido, toda actividad deportiva organizada y federada estará paralizada, con excepción del deporte profesional, como el fútbol. Mientras, las iglesias cristianas y otros templos de culto seguirán abiertos y podrán ofrecer ceremonias religiosas.
Según advirtieron este sábado varias asociaciones de médicos de Austria, las capacidades, especialmente en las unidades de cuidados intensivos, están llegando a sus límites.
Austria dispone de unas 2.000 camas en sus unidades de cuidados intensivos, cuya ocupación exclusiva para la Covid se acerca a un tercio, considerado como el máximo para no sobre exigir el sistema. Incluso durante el próximo confinamiento, advirtieron hoy los médicos, Austria enfrenta un nivel de contagio de torno a los 7.000 casos por día.
Según los datos de la plataforma Our World in Data, Austria es actualmente el país con más infecciones nuevas diarias en todo el mundo, con 995 contagios por cada millón de habitantes, por delante de Georgia y Suiza.