La Fiscalía italiana investiga a una treintena de docentes de Universidades y reputados científicos, entre ellos al catedrático de Ciencias Biomédicas Massimo Galli, una de las voces más respetadas en el país en materia de Sanidad, por amaño de contratos públicos y cobros a cambio de favores, según informaciones publicadas este martes por los medios italianos.
La investigación la está llevando a cabo la Fiscalía de Milán (norte), después de que una denuncia presentada en la jefatura de policía de Pavía (norte) en 2018 alertara de la existencia de un sistema irregular en las inscripciones en un curso de la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal milanesa.
Entre los 33 sospechosos, 24 son profesores de universidades de Milán, Pavía, Turín, Roma y Palermo (sur), y otros cinco investigadores y expertos científicos, que, según las hipótesis de la Fiscalía, habrían favorecido la elección de ciertos candidatos en determinados concursos y desalentado la presentación de currículums de otros.
Estas personas alteraron supuestamente decenas de convocatorias para la asignación de cátedras o títulos de investigador, suprimiendo "el principio de imparcialidad que debe orientar la administración pública", según las fuentes.
Entre los investigados está Galli, uno de los especialistas en enfermedades infecciosas más reconocidos de Italia y que desde el estallido de la pandemia de coronavirus en febrero del año pasado ha sido entrevistado con frecuencia en los medios de comunicación italianos.
Galli es director del Departamento de Enfermedades Infecciosas del hospital Luigi Sacco de Milán y está acusado de haber amañado cuatro convocatorias, una de ellas referida al puesto de docente o asociado de segundo nivel en su departamento del hospital milanés: la plaza fue para Agostino Riva, estrecho colaborador del catedrático.
También está siendo investigado el virólogo Massimo Andreoni, profesor titular de la Universidad de La Sapienza de Roma, director científico de la Sociedad Italiana de Enfermedades Infecciosas y médico jefe del policlínico Tor Vergata, por supuestamente intervenir de forma poco transparente y como miembro del jurado en la elección de otro profesor para la Universidad de Turín en julio de 2020.
Las autoridades italianas tratan de esclarecer, además, si el profesor de Medicina y Cirugía Riccardo Ghidoni habría recibido unos 10.000 euros en un trabajo dental a cambio de favores.
La Fiscalía sospecha que Ghidoni favoreció a otra candidata para una plaza de investigadora con contrato indefinido en el Departamento de Ciencias Biomédicas y Clínicas del hospital Luigi Sacco, pues como presidente de la comisión que debía evaluar su currículum habría convencido a dos candidatos para que no se presentaran.