El Parlamento Europeo investiga por acoso a la belga Assita Kanko: sería el tercer caso en 2023
En enero, la diputada hispanoargentina del PSOE Mónica Silvana González fue sancionada por acoso psicológico a sus empleados.
25 mayo, 2023 09:40El nombre de la eurodiputada belga Assita Kanko, del partido nacionalista flamenco N-Va, fue conocido en España a finales de 2019, cuando recibió a Carles Puigdemont y Toni Comín antes de que iniciasen los trámites para ser eurodiputados. Mucho ha llovido desde entonces, pero las cosas para Kanko no han ido bien: el Parlamento Europeo le ha abierto una investigación por acoso.
Para Kanko, de 42 años, está en juego su reputación como eurodiputada, pero, desde una perspectiva más general, una sanción pondría de nuevo al Parlamento Europeo en el ojo del huracán. Sería el tercer caso confirmado de acoso en la Eurocámara este año, entre ellos el de la eurodiputada del PSOE Mónica Silvana González. Esto se une, además, al caso de corrupción 'Qatargate'.
Kanko es una de las seis vicepresidentas del grupo derechista Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), donde también figura Vox, muy beligerante respecto a la política migratoria de la UE. La denuncia contra ella fue presentada en noviembre de 2022, según los documentos revisados por 'POLITICO'.
[Y si el Qatargate sólo es la punta del iceberg de la corrupción en Bruselas]
En virtud de las normas del Parlamento Europeo, se realizó un estudio preliminar para decidir si había motivos para abrir una investigación, como así se ha visto oportuno.
Kanko ha tenido 13 empleados parlamentarios desde 2019, aunque el dato de ParlTrack no incluye a becarios. Varios de ellos han facilitado a 'POLITICO' documentación y testimonios de los supuestos abusos de poder de Kanko, como exigirles trabajar fuera del horario, durante los fines de semana o en días festivos.
Además, Kanko habría instaurado un clima de terror que hacía imposible a los empleados negarse a las exigencias inapropiadas de su jefa. Los empleados también describieron la ausencia total de límites entre sus peticiones.
Según los testimonios, Kanko no distinguía entre lo que era una orden de trabajo y una petición personal. Al parecer, solicitaba a los empleados que la recogieran, le llevaran comida o cuidaran de su hijo, así como hacerle recados rutinarios o tareas administrativas.
Kanko no ha querido dar su versión de los hechos. Un portavoz de su partido N-VA también declinó hacer comentarios.
"Un antiguo miembro del personal presentó una queja en el Parlamento Europeo contra su despido y esa queja fue atendida y desestimada. También ha iniciado lo que se conoce como un 'procedimiento de acoso'. Para mi pesar y frustración, esos procedimientos están llevando mucho tiempo y, por tanto, siguen su curso", dijo Kanko a 'POLITICO' por correo electrónico.
"He aportado todos mis argumentos y refutaciones dentro de esos procedimientos y estoy en una posición fuerte. Pero también he seguido las normas del procedimiento durante todo este tiempo", zanjó.
Kanko, nacida en Burkina Faso, lleva más de una década en la política belga. En 2019 fue elegida diputada al Parlamento Europeo. Su especialidad es la política migratoria de la UE en la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior del Parlamento.