El 'club de los frugales' sufre su primera deserción: Dinamarca apoya ahora emitir deuda común de la UE para defensa
- El nuevo comisario de Defensa elogia el viraje de la primera ministra Frederiksen y apela a un Big Bang a la hora de revisar la política de seguridad en Europa.
- Más información: Von der Leyen gobernará "desde el centro" y sitúa competitividad y defensa como ejes de su segundo mandato
El autodenominado 'club de los frugales' -los países de la UE abanderados de la disciplina fiscal y que rechazan de plano cualquier mutualización de la deuda- sufre su primera deserción. En respuesta a un entorno geopolítico cada vez más hostil para Europa, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, anuncia un cambio radical de posición: apoyará la emisión de eurobonos y una barra libre de ayudas públicas con el fin de aumentar la inversión en defensa para frenar a Rusia y también en productividad para que la economía europea no se descuelgue respecto a Estados Unidos y China.
"En el Gobierno danés estamos analizando con nuevos ojos las ayudas estatales, la deuda común y el presupuesto de la UE. Es un tiempo nuevo", ha anunciado Frederiksen este domingo en una entrevista a la agencia de noticias danesa. "Todos los países -y eso se aplica también a Dinamarca, que normalmente está en el bando de la austeridad- debemos dejar de lado las reacciones automáticas y examinar cuáles son las necesidades de Europa y luego adaptar la política económica a ellas, en lugar de al revés", explica la primera ministra, que también se ha convertido en una de las más firmes defensoras de Ucrania en la UE.
El 'club de los frugales' se formó oficialmente en 2020 con el objetivo de boicotear la emisión de deuda común para el fondo de recuperación Next Generation de 800.000 millones de euros. Su alineación titular estaba formada por Países Bajos, Austria, Suecia y Dinamarca, con Finlandia como principal simpatizante. Alemania apoyó entonces los eurobonos. Finalmente, los 'frugales' cedieron con la exigencia de que el experimento no debía repetirse, sino que se trataba de una iniciativa puntual y extraordinaria para responder a la pandemia.
Sin embargo, el debate ha vuelto a reabrirse ahora a raíz del informe elaborado por el expresidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, que cifra en 800.000 millones de euros extra al año la inversión necesaria para mejorar la competitividad de la economía europea y fortalecer la industria europea de defensa. Draghi propone una nueva emisión de eurobonos, siguiendo el modelo de Next Generation. Un plan que ha concitado el apoyo de Francia, Italia o España, pero que rechazaban los 'frugales', esta vez con el apoyo de Alemania. "Debemos hablar de proyectos, no de nuevas deudas", dijo el canciller austriaco, Karl Nehammer, en la reciente cumbre de Budapest.
El volantazo de Frederiksen abre ahora una gran fisura en el 'club de los frugales'. ¿Qué ganan los daneses de tener que responsabilizarse de la deuda de los países del sur?, le pregunta el periodista de la agencia. "No creo que podamos pensar así en los próximos años. Creo que hay que verlo un poco al revés. Si Europa sigue quedándose atrás en prácticamente todos los parámetros, entonces perderá su posición. Europa se desmoronará y esto tendrá consecuencias fatales para todos, incluidas todas las familias danesas", responde la primera ministra danesa.
"Lo que está diciendo Frederiksen es que todo ha cambiado, que nada volverá a ser lo mismo, que debemos dejar atrás nuestras posiciones habituales porque el mundo se ha transformado de forma increíblemente dramática. En Europa estamos luchando por nuestra supervivencia, con Rusia a un lado y Trump al otro", explica a EL ESPAÑOL Marlene Wind, profesora de Ciencia Política especializada en la UE de la Universidad de Copenhague.
"Ella admite de forma muy franca y abierta que su posición sobre la deuda común es totalmente nueva, que ha cambiado de opinión: el mundo ha cambiado y ya no hay tiempo para ser reticente, para ser frugal o para ser escéptico del proyecto europeo. Creo que esto puede tener influencia tanto en Alemania como en Finlandia. Quizá no en los holandeses, pero me parece que el 'club de los frugales' va camino de la tumba", sostiene la profesora Wind. De momento, el resto de los frugales no se dan por aludidos y se limitan a tomar nota del cambio de Dinamarca, según señalan a este periódico fuentes diplomáticas.
En contraste, el viraje de Frederiksen ha sido recibido con entusiasmo por el primer comisario de Defensa de la historia de la UE, el lituano Andrius Kubilius, que justo este lunes ha iniciado oficialmente su mandato. "Anuncio muy importante de la primera ministra danesa. ¡Necesitamos un Big Bang en la revisión de la defensa europea!", ha escrito Kubilius en su cuenta de la red social X. La presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, le ha encargado presentar un Libro Blanco durante los primeros 100 días de ejercicio del cargo.
"Rusia gasta hasta el 9% de su PIB en defensa, mientras que Europa gasta una media del 1,9%. Hay algo que no encaja en esta ecuación. Nuestro gasto en defensa debe aumentar. Necesitamos un mercado único para la defensa. Necesitamos fortalecer la base industrial de defensa", dijo Von der Leyen durante el discurso de investidura de su nuevo colegio la semana pasada en Estrasburgo. Dinamarca asume la presidencia de turno de la UE durante la segunda mitad de 2025, justo cuando los debates sobre el próximo presupuesto comunitario y la posible emisión de deuda común alcanzarán su máxima intensidad.