El autodenominado Estado Islámico ha hecho explotar la histórica Gran Mezquita de Al Nuri en Mosul, donde el grupo terrorista proclamó su "califato", según las fuerzas de seguridad iraquíes. Los terroristas también habrían derribado su peculiar minarete inclinado.
Las fuerzas iraquíes se hallaban a decenas de metros de distancia para irrumpir en la mezquita, situada en el oeste de la ciudad.
Un comandante de las Fuerzas Antiterroristas, Sami Kadem al Ardi, dijo a Efe que tras "violentos combates" iniciados en la madrugada, sus unidades estaban "a decenas de metros" del acceso de la mezquita de Al Nuri.
Según Al Ardi, sus hombres irrumpieron en varios callejones del barrio de Al Faruq, que se emplaza en el casco antiguo de la ciudad -la última zona que queda por liberar de Mosul- y que recuperaron el control de más de la mitad de su calle homónima, que empieza en el eje noroeste de esta vetusta área.
Entre lo más destacado, el comandante adujo que han recuperado la iglesia Al Seaa, considerada como una de las más antiguas de la zona.
Por su parte, el jefe de seguridad de la provincia de Nínive -cuya capital es Mosul-, Mohamed al Bayati, dijo a Efe que las defensas del EI "han colapsado" durante los combates en el cuarto día de la fase final de la ofensiva.
"Probablemente, los combates se terminarán en menos de una semana, a pesar de su complejidad y la ferocidad de sus combates", señaló.
Los principales "obstáculos" para la liberación son, según Al Bayati, "las minas en los callejones, las carreteras cerradas por el EI y la afluencia de civiles".
Respecto a los yihadistas, Al Bayati arguyó que el EI está ahora matando a sus miembros heridos, pues no son capaces de ofrecerles tratamiento médico por falta de recursos sanitarios, dado que las fuerzas iraquíes han tomado el control de la mayoría de los centros médicos.
Asimismo, dijo que han convertido los centros de comunicación en mezquitas improvisadas, ya que tienen "miedo" a ser objetivos de bombardeos aéreos.
Sin embargo, en un mensaje distribuido a través de la agencia Amaq, órgano de propaganda vinculado a los yihadistas, el EI acusó, por su parte, a la coalición internacional de destruir la mezquita en un bombardeo.
El portavoz de la comandancia de Operaciones Conjuntas, Yahya Rasul, dijo a la televisión kurda iraquí Rudaw que los combatientes del EI pusieron explosivos en el templo del siglo XII en su huida.